Una de la sugerencias admitidas para mejorar el anteproyecto del saneamiento de Aldán, presentado por el Concello y que financia la concesionaria, es estudiar si las pluviales pueden tener otro destino del que figura, que es mandarlas a la Lagoa de Vilariño. El director del colegio, Claudio Lamosa, asegura que la parroquia de O Hío tiene la peculiaridad de sus lagunas y que pueden ser un elemento depurador de las aguas pluviales antes de llegar al mar. En O Hío están, además de la laguna de Vilariño, las de Vilanova, Donón, Viñó, Nerga y Liméns. Dice que las aguas pluviales no son cristalinas y que bajan también con contaminantes del asfalto de las carretras, de los terrenos, de hidrocarburos o de pesticidas y que en las lagunas, por procedimientos naturales, pierden la carga contaminante. En este sentido, considera que en los proyectos habría que contemplar la posibilidad de integrar las lagunas para que hagan este trabajo de depuración, incluso con anexos que ayuden a este proceso de depuración.
