El gobierno local distingue entre el "alquiler social", a un precio casi simbólico, que propone para dos de las viviendas de Nazaret -si logra que se desafecte otra también tendrá esta finalidad- y la ocupación provisional por transeúntes, a la que está destinada la "Casa dos Pobres", en la calle Enseñanza, aunque a expensas de que se resuelva el litigio contra los "okupas" que permanecen de forma ilegal en el bajo del inmueble y que mantienen paralizada su rehabilitación. El objetivo es "paliar grandes carencias" de la población y Victoria Portas asegura que los servicios sociales tienen un amplio listado de personas y familias que podrían acogerse a ellas cuando esté disponibles.
El gobierno bipartito de Cangas tiene decidido destinar dos de las tres antiguas viviendas de maestros del barrio de Nazaret que ya han sido desafectadas por la Xunta a "alquiler social" a familias y personas especialmente vulnerables, como víctimas de desahucio o con rentas muy bajas. La tercera se pondrá a disposición de los colectivos sociales para que puedan celebrar reuniones y actividades culturales, y aún quedará una cuarta en el mismo bloque que sigue pendiente de desafectar y que el Concello reclama que se haga a corto plazo para poder actuar conjuntamente en la consolidación de la estructura. Al mismo tiempo, el ejecutivo municipal tramita una subvención de la Xunta para realizar las reformas necesarias y ponerlas a disposición de los demandantes.
En la iniciativa trabajan el alcalde, Xosé Manuel Pazos, y la concejala de Servizos Sociais, Victoria Portas. Ambos reconocen que hay "bastante demanda" de vivienda social en régimen de alquiler y también de locales para colectivos, y que es intención del ejecutivo local ir paliando esas carencias. En Nazaret hay 12 viviendas que estaban destinadas a profesores, aunque actualmente la mayoría ya no cumple esa finalidad y tres de ellas ya han sido desafectadas por la Consellería de Educación a instancias del Concello de Cangas, según explicó recientemente el regidor tras reunirse con el jefe territorial, César Pérez Ares. Se trata de dos bajos y un primer piso, todos ellos desocupados y que forman parte del mismo bloque.
Portas incide en que lo "ideal" es actuar conjuntamente en todo ese bloque, el más próximo al colegio de Nazaret y cuya puerta común está tapiada para evitar que se repitan las ocupaciones ilegales. La intención es comenzar por la sustitución de la cubierta, y para ello es necesario que se produzca la cesión de la cuarta vivienda, que también está desocupada y además se sitúa en la planta superior, por lo que resulta imprescindible para trabajar en el tejado. La actuación se plantea con dinero que se recibiría de la Xunta de Galicia a través de un fondo de cooperación destinado a conservar y rehabilitar el patrimonio construido y que incluye las viviendas sociales. El mismo al que se ha recurrido para reformar el local vecinal de Seixo, en Darbo. La convocatoria de las ayudas es "inmediata", según confirmaron representantes autonómicos, por lo que Cangas está agilizando los trámites para concurrir a ella.
Pazos confirma que llevan tiempo "estudiando" las posibilidades de uso que se abren y que el alquiler social y la cesión a colectivos son las prioridades. Al contrario de lo que sucedía en otros centros escolares, como Castrillón (Coiro), donde las casas de profesores desaparecieron con la construcción de un nuevo colegio, las 12 viviendas de Nazaret están fuera del recinto, lo que amplía las opciones. En Espiñeira (Aldán), la vivienda que quedó en desuso pasó a ser el local social de la Asociación de Nais e Pais de Alumnos/as (Anpa), y las demás no está desafectadas. El gobierno cangués debe concretar el "tipo de alquiler social" que aplicará en Nazaret y plasmarlo en documentos que lo justifiquen.
