El traslado de Lago Paganini desde Cangas a Bueu es recibido con evidente satisfacción por parte del ayuntamiento bueués, que destaca la importancia económica, social y para el empleo. Es también un refuerzo para el polígono de Castiñeiras, justo en un momento en el que un grupo de empresarios promueve con el apoyo del Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) y del propio Concello la ampliación de este ámbito y la puesta a disposición de más suelo industrial.

La presencia de Lago Paganini en Castiñeiras tendrá otra vertiente de carácter simbólico: estará situada a apenas 100 metros de la fábrica de Palacio de Oriente/Antonio Alonso, otra de las conserveras históricas. Las dos además tuvieron que renacer de sus cenizas debido a sendos incendios, registrados con escasos meses de diferencia: en diciembre de 2011 en el caso de Lago Paganini y en agosto de 2012 en el caso de Palacio de Oriente.

La incógnita ahora es cuánto tiempo tardará el Concello de Bueu en poder tramitar la licencia. Desde el gobierno local avanzan que la semana próxima la junta local de gobierno aprobará las bases para la contratación de un técnico de la administración general, con un perfil jurídico y vinculado al área urbanística. "Esperamos completar el proceso en dos meses y con la incorporación de esta persona, que deberá realizar los informes de las licencias, poder desbloquear el actual tapón y agilizar los trámites", afirman.