La alameda de Aldán, así como la urbanización de A Choupana y la Rúa Poio, en el entorno urbano, serán los destinos de los tres próximos composteros comunitarios que el Concello de Cangas tiene previsto instalar a corto plazo y con los que se doblará la actividad que generan los que ya funcionan en la Avenida de Galicia, el Parque da Palma y la Avenida de Ourense, frente al aparcamiento de la playa de Rodeira. Los resultados que se están obteniendo y la "importante participación social", en palabras del concejal de Urbanismo e Medio Ambiente, Hugo Fandiño, animan al gobierno bipartito a implantar nuevos composteros que se incorporarán al Plan Revitaliza de la Diputación, aunque su instalación todavía no tiene fecha, señala el edil, que está a la espera "de los presupuestos" para concretarlo. Lo que sí se ha hecho ya es repartir 63 nuevos composteros individuales a otros tantos cangueses que lo habían solicitado y que recibieron el miércoles una charla informativa sobre su uso y aprovechamiento.

Fandiño y técnicos de su departamento realizaron un estudio de las demandas vecinales y los lugares idóneos para seguir avanzando en los planes de implantación del sistema de compostaje y concluyen que los tres más viables son los de la calle Poio, A Choupana y la alameda de Aldán. En este último caso, porque es "un lugar apropiado" para empezar a extender a las parroquias esta alternativa de gestión de residuos orgánicos considerada más ecológica y también económica, pues contribuye a reducir las cantidades que se envían a Sogama y, en consecuencia, la factura que desembolsan los concellos. Los de A Choupana y Rúa Poio siguen los mismos criterios y "dan cobertura" a zonas del entorno urbano algo distantes de los composteros ya instalados. El gobierno local también "estudia" una propuesta similar para los alrededores del colegio de San Roque, aún sin concretar.

Los centros de compostaje comunitario de la Avenida de Galicia, A Palma y Avenida de Ourense, fueron instalados entre 2016 y 217, y en este tiempo se han tratado en ellos alrededor de 120 toneladas de biorresiduos y se han producido unas 40 toneladas de compost, que se repartieron entre el vecindario y los servicios municipales para el cuidado de jardines públicos. A ellos se suman los composteros individuales, también con creciente demanda entre la ciudadanía, según aseguran los representantes institucionales.

Además de los tres centros de compostaje de Cangas, la comarca de O Morrazo suma otros seis (dos en Bueu, en la zona de As Lagoas) y cuatro en Moaña (repartidos entre Reibón, O Rosal, Concepción Arenal y O Real). En conjunto, los centros de compostaje comunitario del Plan Revitaliza instalados en O Morrazo ya han gestionado más de 250 toneladas de biorresiduos y producido casi un centenar de compost sin cribar.