La concejala de Servicios Sociais de Cangas, Victoria Portas, se hacía eco ayer de estas nuevas intoxicaciones alimentarias en comedores de Pontevedra gestionados por la Federación Provincial de ANPA de centros públicos de Pontevedra (FANPA), que preside Rogelio Carballo. Se pregunta cómo puede ser que el lunes día 21, la Xunta y Epidemiología ya conocían el origen de la contaminación y no se retiró todo el lote de del mismo pescado: "Tras una semana que se detectó en escuelas infantiles de Cangas, siguen apareciendo en otras escuelas".

La gerente de escuelas infantiles del Consorcio de Benestar Social de la Xunta, Carmen García Campelo, llamó expresamente ayer al alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos, para transmitirle tranquilidad, después de que la concejala Victoria Portas asegurara que seguía sin respuesta de la Xunta a su escrito solicitando información y que los padres tampoco aunque en el caso de A Choupana aseguran que la directora se comportó "superbien".

Pazos asegura que Campelo le dio explicaciones de todo, que las direcciones de las escuelas actuaron de una forma exquisita y que están a la espera de que Sanidade concluya las inspecciones ya que se recogieron muestras del alimento en todas las empresas, tanto de distribución como de catering. En su caso manda también un mensaje de tranquilidad.

Padres de A Choupana aseguran que por parte de la dirección de la guardería se quedaron tranquilos, aunque piden más control por parte de la administración ya que en Cangas el episodio alérgico se repitió el 10 y el 18 y el primer día no había pescado. Dicen que la palometa se comió el día anterior y que en menú al día siguiente había macarrones con tomate por lo que las sospechas también recayeron en el tomate que pudiera activar la histamina causante de la reacción.