El culebrón de la última fase del paseo de Domaio sigue latente. El Concello recibió el 17 de mayo el convenio de Portos por el que esperaba desde hacía 13 meses. Desde entonces todavía no se firmó para poder iniciar los trabajos. La complicación principal, más allá de los años de cesión, parte de una cláusula sobre la disponibilidad de los terrenos, que el Concello pide modificar para poder adjudicar los trabajos.

La redacción del convenio especifica que el Concello pasará a ser titular de los terrenos de Portos que se le ceden en cuanto arranquen las obras de construcción. Sin embargo, los técnicos municipales argumentan que la disponibilidad de terrenos debe ser previa, al no poder licitarse ni adjudicarse una obra para unos terrenos de los que no dispone el Concello.

La alcaldesa, Leticia Santos, explica que técnicos municipales y de Portos de Galicia están en contacto en las últimas semanas para subsanar este problema, aunque todavía no hay una fecha para la firma de dicho convenio.

Esta obra fue desbloqueada gracias en buena medida al trabajo de la Asociación de Veciños O Monte Faro de Domaio, que se reunió con ambas partes en mayo ante el riesgo de que se pierda la inversión de 100.000 euros comprometidos por la Diputación de Pontevedra y que servirán para ejecutar la última fase de un paseo marítimo por el que la parroquia de Domaio lleva años aguardando.

El proyecto a ejecutar contempla la construcción de 200 metros de paseo, entre el club de jubilados y el muelle. Completará las dos primeras fases ejecutadas por la Autoridad Portuaria de Vigo hasta 2013. La actuación incluye una zona paralela a la línea de costa del paseo y otra de aparcamiento con capacidad para 50 plazas. Incluye también un paso de peatones de cinco metros de largo, con bandas transversales de 50 centímetros que se enfrenta al acceso de vehículos hacia el club de jubilados. Este paso de peatones partirá del final del paseo marítimo y lo conectará con la otra parte del añadido: una zona peatonal preferente.