La Diputación de Pontevedra acaba de trasladar al Concello de Bueu el proyecto para la primera fase de la mejora de la carretera provincial que discurre entre Beluso, A Roza y Cabo Udra. Los técnicos han finalizado el trabajo sobre el terreno, que prevé la afección a 31 propiedades y la ocupación de casi 1.660 metros cuadrados de terreno. La obtención de esa superficie le corresponderá ahora al Concello de Bueu, que deberá negociar con los vecinos cesiones o expropiaciones. La intención manifestada desde el ejecutivo local es reunirse con los afectados y exponer el proyecto remitido por la Diputación en la Casa do Pobo de Beluso.

La primera fase de esta actuación se centra en el tramo que abarca desde la intersección hacia Sar-Tulla y el entorno de la iglesia parroquial de Beluso, que se considera "prioritario". Es un trazado de 750 metros de longitud, en el que se prevé una senda peatonal en un margen de la calzada y la creación de dos zonas de coexistencia. Esto es, dos espacios que tendrán un firme diferenciado -se prevé un tipo de hormigón continuo- y en el que los peatones tendrán preferencia sobre los automóviles.

Esas dos áreas de coexistencia se prevén al principio y al final del tramo objeto de la actuación. Una de las consecuencias es que se perdería la bolsa de estacionamiento que existe en la actualidad alrededor de la iglesia de Santa María. La alternativa que se maneja desde la administración local es gestionar la obtención de terrenos en las inmediaciones para habilitar un área de aparcamiento.

El área de Mobilidade de la Diputación denomina a este proyecto "Recuperación do espazo público e mellora da mobilidade peonil na EP-1302". En el margen derecho de la vía [en sentido descendente] se prevé acondicionar una senda peatonal con un ancho previsto de 2,5 metros, delimitada con respecto a la calzada. La actuación se completará con nueva señalización e iluminación pública. Para reforzar la preeminencia de los peatones sobre los automóviles se restringirá el límite máximo de velocidad, que podría quedarse en 20 kilómetros/hora.

La Diputación deja ahora en manos del Concello de Bueu la negociación con los propietarios afectados para obtener los terrenos necesarios. Sin contar este capítulo, el coste previsto inicialmente por la institución provincial para este tramo de la carretera de A Roza asciende a unos 400.000 euros, de los que el 70% los sufragaría la Diputación y el 30% restante el Concello. Para una segunda fase se dejaría la intervención sobre la primera parte de este vial, un trazado de 350 metros entre el cruce con la PO-315 y la bajada hacia Sar y Tulla, con una inversión estimada en 360.000 euros.

La decisión de priorizar el itinerario entre la bajada a Sar y la iglesia se debe al elevado tránsito peatonal que registra este tramo de la vía, que sirve de acceso al templo y al cementerio parroquial de Beluso. Además agrupa más de la mitad de las propiedades afectadas por una actuación con la que se espera mejorar la seguridad vial en una carretera que es el principal acceso al espacio natural de Cabo Udra.