El deterioro de la pista de skate ubicada junto a la playa de Rodeira y a la ribera del regato Saíñas ha provocado quejas de los usuarios y la respuesta del Concello, que reconoce la degradación de esas instalaciones municipales y la necesidad de actuar para mejorar las condiciones para esa práctica deportiva. Las concejalías de Xuventude y Obras e Servizos actúan de forma coordinada para sustituir varios elementos deteriorados, reparar los que aún sirven y levantar un pequeño muro de contención bordeando el cauce del Saíñas, sobre el que ahora permanece tumbada la valla de madera por la inestabilidad del terreno.

"Sabemos que esa zona está fatal e imos actuar", señala la edil Mercedes Giráldez, y anuncia que hay varios elementos encargados y "en camiño" desde una fábrica de Alemania especializada en este tipo de instalaciones, lo que complica la logística y de ahí que se haya producido un retraso con respecto a las previsiones. "Xa llo explicamos aos representantes da asociación de skaters, cos que falamos desde o verán pasado, e agardamos que todo quede listo nas vindeiras semanas", añade la concejala. Los nuevos módulos son "un quarter grande e un pequeno, un plano inclinado grande" y otros elementos específicos construidos en hormigón, no en madera, lo que evitará "andar con parches".

Barandilla

La actuación integral también incluye el acondicionamiento del entorno, y en particular la reposición de la barandilla de madera volcada sobre el río. El Concello pretende levantar "un pequeno muro de contención", de medio metro de ancho, uno de alto y 40 metros de largo en el tramo final del cauce en la zona de ocio de Rodeira. Además, el proyecto contempla la sustitución de los postes podridos, el pintado de la solera y el acondicionamiento de todo el entorno.

El presupuesto de la actuación, que se reparten Xuventude y Obras e Servizos, ronda los 32.000 euros, de los que algo más de la mitad corresponde a los módulos de la pista de skate. El Concello también afrontó recientemente el pago del servicio de inspección y certificación de las instalaciones, con un coste de 1.270 euros.