A primera hora de la mañana de ayer la familia desalojada por el incendio pudo retornar a su vivienda, que afortunadamente no sufrió las consecuencias del fuego. "El desalojo fue por precaución, sobre todo por el humo. De hecho hoy por la mañana [por ayer] aún olía mucho", explicaban. El alcalde de Bueu, Félix Juncal, se desplazó al lugar y les ofreció la posibilidad de pasar la noche en un hotel, una oferta que declinaron ya que podían acudir a casa de un familiar. "Estábamos en casa y fue mi hijo quien notó al principio un olor a quemado. Yo al principio no lo noté, pero en cuanto me levanté sí que lo percibí. Vimos que salía humo de los halógenos y los apagamos porque pensamos que se estaban quemando, pero luego salía por más sitios", explican. A continuación sientieron que llamaban con insistencia a la puerta para avisarles de que había un incendio en el edificio colindante. De inmediato acudieron a avisar al dueño de la empresa, que reside muy cerca.