Algo más de medio centenar de propietarios de montes de Bueu se dieron cita esta semana en una reunión que tenía como objetivo sentar las bases de una actuación conjunta para aprovechar de forma más eficiente el monte, algo que podría cobrar forma próximamente en las zonas de Ramorta y O Valado. Manuel Freire, uno de los promotores del evento, aseguró que hay que planificar el futuro del monte porque "tal y como está no tiene futuro. La gente joven no tiene intención de trabajarlo y es una lástima, porque Galicia, por condiciones climatológicas y calidad del suele puede tener al monte como una fuente de recursos".

La reunión sirvió para apuntar la tendencia futura hacia la bioeconomía, previendo una gran demanda de madera al tratar de reducir cada vez más los materiales fósiles, como el plástico y sus derivados. La concienciación sobre la necesidad de cuidar el monte y de tenerlo como fuente de ingresos fue otro de los aspectos comentados en el Centro Social do Mar. "Nuestros abuelos tenían en el monte una caja de ahorros. De allí tiraban cuando necesitaban dinero. De aquella era rentable porque estaba cuidado. Y ahora no es rentable porque no se cuida y no se cuida porque no es rentable. Es un círculo vicioso".

El planteamiento es hacer una gestión profesional del monte, buscando asesoramiento y optando por vías diferentes como la madera, pero también la ganadería, las setas o los frutales.