Moaña amaneció el lunes con las cenizas del virulento incendio que arrasó el astillero tradicional de Casqueiro y con un tramo de la céntrica calle Concepción Arenal todavía cortado. Tras el shock inicial y la concentración de repulsa toca determinar responsabilidades. Agentes de la Policía Judicial trabajaron ayer por la mañana sobre el terreno para esclarecer lo sucedido. Recogieron muestras de maderas y cascotes y fotografiaron con minuciosidad todos los rincones de la carpintería tradicional. A falta de que la investigación concluya de forma oficial, los primeros indicios determinan que el fuego fue provocado y se generó desde la parte trasera de las naves, lindando con la línea de costa, extendiéndose rápidamente hacia la fachada frontal. De momento no se conocen restos de ningún artefacto incendiario.

El incendio, calificado como "atentado" por todos los defensores de la protección de los astilleros, seguía siendo el principal tema de conversación entre los vecinos durante la jornada de ayer.

La responsable del bar ubicado al lado había sido la primera en rociar de agua las llamas del primer intento de incendio. Fue en febrero de 2016 y entonces se pudo sofocar sin grandes problemas. La madrugada del sábado las cosas fueron muy diferentes. "Estiven baldeando o chan ata ás dúas e vinte da madrugada, e non mirei a ninguén. Cando cheguei a casa, ao pouco tempo, escoitei un ruído moi grande. Pensei nun accidente. Seguramente foi porque caiu o tellado do asteleiro. Foi cando me decatei de que estaba ardendo", relata.

Con la policía científica charlaba Óscar Riobó, de la familia propietaria de las instalaciones. Poco optimista con respecto a la posibilidad de determinar la autoría del incendio, lamentó todo lo perdido, entre lo que se encuentran varias embarcaciones como una "dorna nai" de 8 metros de eslora, un chinchorro, otra dorna más pequeña, un bote de recreo, una embarcación olímpica de vela y dos piraguas "unha delas moi antiga, que era do meu pai". Riobó no puede evitar pensar, como muchos vecinos que se acercaron al lugar de los hechos, en lo que podría haber supuesto este incendio en el centro de Moaña "se chega a soplar o vento e se extende ás vivendas" o incluso si llega a coger a alguien dentro. Explica que la instalación eléctrica del astillero queda inactiva cuando cierran la puerta, al bajar los limitadores. Al iniciarse las investigaciones de la Policía Judicial se acercaron al lugar efectivos de la Policía Local y del gobierno municipal.

Autobús

Con la salida de Concepción Arenal hacia la carretera general (PO-551) cortada desde el incendio, el transporte público cambió sus rutas para circular por la calle Ramón Cabanillas. Quedan anuladas de forma transitoria las paradas de Daniel Castelao, José Costa Alonso y la propia Concepción Arenal, estableciéndose dos nuevas paradas: Ante el Eroski y ante La Social.

Se espera que esta misma mañana acudan técnicos de Urbanismo a determinar si la fachada que se salvó de las llamas presenta o no riesgo de desplome sobre la carretera. En caso negativo, será necesario tirar de forma controlada o apuntalar estas estructuras, en cualquier caso se requiere pedir una autorización a Costas del Estado, titular de estos terrenos. Hasta que quede garantizada la seguridad no se reabrirá la calle al tráfico.