La sentencia es firme porque el acusado no recurrirá el fallo judicial. Esto abre la puerta a que se inicien los trámites para encontrar una familia que quiera hacerse cargo de los perros. La hembra, de nombre Xena, parece tenerlo más fácil ya que en el hogar de acogida en el que se encuentra ahora han mostrado su interés en adoptarla para quedarse definitivamente con ella. El macho, Dako, está también en un domicilio de acogida y se busca a una persona o familia que quiera adoptarlo. Cualquier interesado puede llamar al teléfono de la Protectora, el 697 52 33 85.