Trabajo alerta de que persisten las deficiencias de la oficina de empleo

La inspección constata que los problemas de espacio, ventilación o ruido, recogidos ya en 2012, no han sido subsanados

Traballo había alquilado un local en 2012 para el traslado, pero no logró la licencia municipal. // S. Álvarez

Traballo había alquilado un local en 2012 para el traslado, pero no logró la licencia municipal. // S. Álvarez

Cangas

La Inspección de Trabajo constató recientemente las deficiencias y la situación anómala en la que se encuentra la Oficina de Emprego de Cangas. Un reciente informe del Ministerio de Empleo explica que el 28 de agosto de 2014 la inspección de Trabajo visitó esta oficina de Cangas y constata que las deficiencias en materia de espacio, ventilación, temperaturas, ruido, o niveles de luz entre otras se mantienen. Ya habían sido recogidas en la evaluación de riesgos de 2012.

La Inspección considera un hecho constatado que estas anomalías no fueron subsanadas. Asegura que los hechos se comprobaron también con la documentación aportada al respecto y se recogieron nuevamente en el informe de la directora provincial sobre las necesidades de las oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) en la provincia de Pontevedra.

Trabajo deja claro que se incumple la legislación en materia de prevención de riesgos laborales y exige que se subsanen estos problemas en un plazo de 180 días.

La evaluación de riesgos de 2012 explicó que el local dispone de 180 metros cuadrados para 17 funcionarios. Considera que el espacio es insuficiente, con riesgo de choque contra los objetos. Sobre todo es insuficiente en la zona destinada a prestaciones. Apunta también a que no existe una sala de espera y los usuarios obstruyen la entrada.

Ya entonces se alertó de las elevadas temperaturas que se alcanzan en días de calor, y la imposibilidad de abrir las ventanas sin una escalera.

El ruido es muy elevado debido a que el número de personas en el interior se dobla cuando se atiende al público. Esto hace que las conversaciones con las personas puedan ser escuchadas por la gente que espera su turno. Los niveles de luz son muy bajos y el acceso al local es inadecuado para personas con movilidad reducida.

La Consellería de Traballo había alquilado en 2012 un local en la Avenida de Vigo para el traslado de estas oficinas, pero nunca había llegado a obtener del Concello la licencia de obra para su acondicionamiento.

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