El Plan Sectorial de Ordenación de Áreas Empresariais de Galicia entra hoy en vigor, tras su publicación ayer en el DOG junto a las disposiciones normativas. Este documento recoge la propuesta de la Agrupación de Interés Económico de Moaña para crear un polígono industrial en la zona de Cruz da Maceira, un proyecto cuya tramitación comenzó hace una década. La propuesta de Moaña todavía no viene delimitada con detalle, como sí ocurre con la mayoría de las 117 actuaciones previstas en 95 concellos. Esto se debe en parte a que los empresarios promotores deben renegociar la cesión de terrenos con la junta de montes. Pero sobre todo se debe a que el polígono de Moaña, junto a otros cuatro, deben ser sometidos a un procedimiento de evaluación ambiental ordinario. Todos ellos se incluyeron en el plan autonómico en la fase de información pública, tras las alegaciones presentadas por los promotores, de ahí que todavía no cuenten con este estudio de impacto. La delimitación que aparece reflejada incluye terrenos comunales y se extiende entre la carretera hacia Marín (PO-313) y el vial provincial para acceder al lago de Castiñeiras.

Junto al polígono de Cruz da Maceira, para el que el plan de áreas empresariales determina la superficie de 435.000 metros cuadrados, deben contar con un estudio ambiental los siguientes proyectos: Polígono de Chaos (Lobeira); de Novo Milladoiro (Ames); de Seixalbo-O Cumial (Ourense) y de As Encrobas (Cerceda).

El presidente de la agrupación promotora, Luis Alves, saludó ayer como una buena noticia la entrada en vigor del documento que marca el futuro de la superficie industrial en la comunidad. Señala que ya contaban con la necesidad de un estudio ambiental. "Ahora nos corresponde presentar el proyecto y tratar de que el parque tenga el menor impacto posible", destaca. Recalca que los terrenos que en su día les propusieron los comuneros y que rechazaron serían más visibles que en la zona de Cruz da Maceira.

De todas formas, Alves se mostró prudente ante la publicación de ayer en el DOG y estudia con detalle los próximos pasos a dar.

Desde la Xunta explican que el documento que recoge esta demanda de un grupo de empresarios moañeses sirve para definir los ámbitos del territorio gallego susceptibles de acoger naves empresariales para cubrir las necesidades de terreno a largo plazo.

Iniciativa

El polígono moañés parte de una iniciativa privada y su construcción tendría que correr a cargo de los promotores, por lo que los organismos públicos no serían los encargados de desarrollarlo.

Y es que la Xunta diferencia claramente entre las 53 actuaciones que se desarrollarán a través del Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) o de Xestur y el resto. Las primeras suman 16,6 millones de metros cuadrados de superficie y se asegura que solo se desarrollarán en función de la demanda real de suelo industrial contrastada a partir del Rexistro de Demandantes, garantizando así que todas las actuaciones sobre el terreno que se lleven a cabo tengan asegurada una demanda mínima.

En total el plan de la Xunta reserva terrenos por una superficie de 46,3 millones de metros cuadrados.