El vicepresidente de la Xunta de Galicia y conselleiro de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza, Alfonso Rueda Valenzuela, visitó ayer Bueu para conocer las instalaciones y el trabajo que se desarrolla en el Centro de Información ás Mulleres (CIM). Una visita que en su caso es más bien un regreso a una parte de su pasado de hace ya casi 20 años, como ayer reconocía con una sonrisa. Y es que el consistorio buenense fue su primer destino en la administración pública después de aprobar la oposición de secretario-interventor municipal.

Fueron apenas dos meses, en el año 1995, pero el hoy conselleiro guarda un "magnífico recordo" de aquel periodo. "Cando aprobei as oposicións de secretario-interventor tiña que facer as prácticas e naquel momento o meu tutor e preparador era o secretario municipal en Bueu (Eduardo Portela Fernández), así que vin a facelas aquí e este foi o meu primeiro contacto real coa vida municipal", rememoraba durante la conversación con los medios y con las autoridades locales.

En el Concello le esperaba una representación de la corporación encabezada por el alcalde, Félix Juncal, que fue elegido como concejal por primera vez justo cuando Alfonso Rueda estaba realizando sus prácticas en Bueu. No obstante, no llegaron a coincidir en el día a día de la vida municipal porque la estancia del ahora conselleiro fue muy breve y enseguida fue destinado al Concello de A Cañiza.

La visita de ayer al CIM de Bueu fue también una excusa perfecta para visitar y saludar a algunos de los funcionarios y empleados municipales con los que coincidió en aquella etapa. Especialmente efusivo fue con uno de los funcionarios del departamento de Secretaría Municipal, Salvador Torres, al que saludó con un gran abrazo y al que le dijo con muy buen humor que "aprendín máis de ti que do secretario". Las personas que recuerdan el paso de Rueda Valenzuela por el ayuntamiento le recuerdan como "una persona muy campechana, abierta y que hablaba con todo el mundo".

En aquel entonces la Secretaría Municipal se encontraba en la segunda planta, donde hoy está el departamento de Servizos Sociais. "No tenía un trabajo concreto, su misión era aprender y ver cómo era el proceso y la gestión administrativa municipal", recordaban ayer funcionarios que coincidieron con él en aquella etapa. El destino quiso que justo en aquellos momentos se celebrasen unas elecciones locales y que significaron la salida de Manuel Freire Lino de la Alcaldía y el segundo mandato del nacionalista Xosé Novas. "Tiven a oportunidade de ver a vida municipal no seu sentido amplio porque naquel momento produciuse un cambio na Alcaldía", apuntaba ayer. Todo con un punto de nostalgia porque "cando un vai cumprindo anos fai memoria e xa pasaron máis tempo do que a min me gustaría".