El conselleiro de Educación, Cultura y Ordenación Universitaria, Jesús Vázquez, abrió ayer las primeras jornadas sobre el denominado Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) que se celebran en Cangas en el Auditorio Municipal y al que asisten más de 400 profesionales de la educación y de la sanidad de O Morrazo y Galicia que tratarán entre ayer y hoy de sacar adelante un protocolo de actuación para estos casos. Las jornadas que se abrieron ayer son de esos actos que sirven para hacer comarca. En el Auditorio se dieron cita todos los alcaldes de los concellos de O Morrazo, con independencia del color político.

El trastorno de hiperactividad se identifica cada vez con más fiabilidad e incluso ya hay estadísticas que se confeccionaron a partir de los datos que presentaron los centros educativos de O Morrazo. El número de casos diagnosticados de TDAH es de 248 en una población escolar de 7.535 alumnos de Educación Infantil, Educación Primaria y ESO. Lo que supone que este trastorno afecta a un 3,29% de la población escolar de la comarca.

Si nos atenemos a los casos diagnosticados en Educación Infantil, el porcentaje es del 0,23 (4 casos), sube en Eduación Primaria hasta un 4,62% (161) y baja en la ESO, para llegar al 3,63% (83).

Por lo que se refiere a los casos diagnosticados por concellos, en Cangas aparecieron 109 (44%); Moaña, 92 (37%); Bueu, 38 (15%) y Vilaboa, 9, (4%). La estadística refleja que el porcentaje de alumnos diagnosticados es mayor en hombres ( 197, el 79%) que en mujeres (51, el 21%),

El diagnóstico se realiza en su mayor parte entre los 6 y los 8 años; esto ocurre en el 32,6% de los casos, mientras que de 8 a 10 años el porcentaje es del 27,,6% , de 10 a 12 años, del 2 1% y de mayores de 12 años un 6,1%.; en menore de 6 años el diagnóstico se realiza en un 12,7% de los casos. La fría estadística refleja que el diagnóstico se realizó en un 52% en la escuela, en un 8% por los médicos, en un 35% por inciativa de la familia y en un 6% la iniciativa se planteó por parte de gabinetes.

De los 248 jóvenes diagnosticados con el mencionado trastorno, el 65% (160 niños) reciben medicación y un 35% (87) no la necesitan o no se les prescribe.