Ayer finalizó el periodo de siete días de luto oficial decretado por la Xunta de Galicia tras el accidente del tren en Santiago y el pleno comenzó con un minuto de silencio. El primer asunto del que se dio cuenta fue la renuncia de José Manuel Rosas a su acta de concejal del PP. El ex portavoz de los populares quiso sentarse por última vez en el salón de plenos junto a sus compañeros y lo hizo para despedirse. Y lo hizo de una manera elegante y con buenas palabras para todos. "Foi unha honra tervos a todos como compañeiros e quero mostrar o meu respecto e admiración pola vosa labor, a veces pouco recoñecida", dijo desde su asiento. Rosas es patrón mayor de la Cofradía de Bueu y ayer resumió en apenas una frase su paso por la política: "Cheguei tarde e marcho cedo".

Al acabar su breve intervención se levantó de su asiento y se despidió uno a uno de todos los concejales de la corporación y se sentó al final del salón de plenos, junto a su esposa. Los portavoces del resto de grupos municipales le dedicaron palabras de reconocimiento y elogio y le desearon lo mejor en su empeño por la defensa de los intereses del sector de la pesca de bajura. La despedida más breve y emotiva fue la de sus compañeros del PP. "Gracias por ser no solo un compañero, sino un amigo", dijo Manuel Santos Pires.