"E ao voltar, ¿que che hei dicir?/ ¡maldito o día e a hora/ en que vos dexei aquí/ para percurar a vida fóra". Con la letra de la cantiga "Muller" de Fuxan os Ventos, el alcalde de Bueu, Félix Juncal abrió ayer la Gala da Igualdade que con motivo del 8 de marzo, Día de la Mujer Trabajadora, celebra siempre el Concello y que estuvo dedicada a las mujeres de la emigración en la figura de diez personas que tuvieron que trabajar fuera, dejando muchas veces a las familias aquí y a las que el regidor agradeció su contribución al crecimiento económico y avance social. Juncal destacó que se trataba de "mulleres loitadoras" que alcanzaron el éxito y retornaron a Bueu, pero no todas las historias fueron afortunadas, hubo dramas en muchas partidas, que hoy vuelven a estar muy presentes con la crisis económica que obliga de nuevo a la juventud a seguir los pasos de sus abuelos, aunque con otros medios de comunicación que hacen más fácil la aventura de la emigración si bien apostó por romper esta dinámica que trae desestructuración familiar. El alcalde reconoció ayer "a valentía e os méritos das nosas veciñas que sen saber qué era Alemania, ou donde estaba ou que se falaba, sen saber case nin ler nin escribir, o que era un tren ou un teléfono foron quen de triunfar".

Fueron diez las homenajeadas, aunque solo pudieron acudir al acto, en el que se les entregó un plato de Sargadelos, ocho de ellas: Rosa Vilas, de 82 años, que estuvo 30 en Francia; Amelia Pires (madre del concejal Manuel Santos Pires), de 71 y 15 en Suiza; Nieves Pousada, de 76 y 8 años en Suiza; Josefa Vidal, de 72 y 11 en Uruguay; Carmen Agulla, 71 años y 20 en Holanda; Rosa López que pasó 22 de sus 79 años en Alemania; y las hermanas María Elena y Rosa Dopazo (tías del edilJosé Castro) que pasaron 44 y 14 años, respectivamente, en Alemania. Josefa Argibay, 44 años en Brasil, no pudo acudir por estar de viaje y Encarnación Pousada, de 80 y 20 años en Alemania y Suiza, por estar con gripe.