Melodía nocturna por los Pepes y Pepitas

La noche de Cangas volverá a ser el escenario de un itinerario colmado de buenos deseos, melodía y afecto. El Coro San José celebra esta noche su ruta nocturna para rendir homenaje a los Pepes y Pepitas del municipio. Las serenatas serán la fiel compañía de esta famosa procesión que, tal y como marca la tradición, partirá desde la Praza do Arco esta medianoche con la intención de distribuir su alegría por todos los rincones del municipio. Después de cantar a la primera Josefa y de congregar a cientos de fieles, el grupo de músicos y sus admiradores continuarán con sus declaraciones a lo largo del casco antiguo de la villa.

La segunda gran parada será la Taberna do Jefe y, a continuación, seguirán hasta altas horas de la madrugada una ruta melodiosa por los balcones de los homenajeados. La cita con los Pepes y Pepas es uno de los eventos nocturnos más señalados en la agenda canguesa y está previsto que participen cientos de personas para arropar una ofrenda que, además de resaltar un bonito nombre, simboliza un himno al buen gusto y a la pasión por la música.

Repertorio

No queda ningún tema pendiente para esta noche. Después de meses de ensayo y de afinación, por fin llega la ansiada cita del coro San José. El repertorio de este año, al igual que en anteriores citas, incluye ritmos heterogéneos que conquistarán a todos los gustos y que van desde el pop hasta el famoso swing, pasando por el danzón cubano y el bolero vals argentino. Antonio González, más conocido como Tucho Perete, continúa siendo el epicentro del grupo que, este año, está compuesto por 51 personas, entre las que se encuentran una docena de sopranos, nueve contraltos, once tenores y los mismo bajos. Además de las voces, se incluyen los sonidos de cuatro guitarras, dos violines y un violonchelo que darán, un año más, alas al armonioso itinerario.

"Quién te cantará", de Juan Calderón, "Canción con todos" de C.Isella y A. Tejada, "Rosa roja" de Oscar Hernández y "Buona sera" de Sigman y De Rose son los temas escogidos para hacer vibrar el manto estrellado de Cangas. Ahora sólo queda esperar a que las condiciones meteorológicas también arropen el encuentro y no obliguen a sacar el paraguas.