Alarma en un edificio de la calle Concepción Arenal tras dejar abierto un inquilino el hornillo de gas

Los bomberos del parque comarcal de O Morrazo y la Policía Local de Moaña tuvieron que acudir ayer hasta un edificio en el número 116 de la céntrica calle Concepción Arenal debido a la alarma de los vecinos por un fuerte olor a gas que procedía de uno de los pisos de la primera planta. El suceso ocurrió sobre las 11.30 horas. La Policía Local, que llegó en primer lugar, comprobó que el olor procedía del piso de la primera planta, que en ese momento estaba vacío. Tras localizar telefónicamente al inquilino, que se encontraba en Vigo, y tras pedir su consentimiento para entrar en la vivienda, los agentes comprobaron, ya dentro, que el olor procedía de la cocina en donde esta persona había dejado abierto uno de los hornillos del gas butano.

Afortunadamente no se produjo ninguna deflagración, pese a que había bastante acumulación de gas. Los policías procedieron a cerrar el gas y abrir las ventanas mientras desde el parque comarcal de Bueu se desplazaban los bomberos. Nada más llegar, los bomberos procedieron a realizar las oportunas mediciones con un exposímetro comprobando que los resultados eran positivos, tanto en las escaleras del edificio como en la propia vivienda, por lo que se siguió con las labores de ventilación.

Gasóleo en Domaio

Por otra parte, la Policía de Moaña acudió ayer, sobre las 14.30 horas, al puerto deportivo de Domaio por un fuerte olor a gasóleo. Personados en el lugar, comprueban que efectivamente había mucho olor a combustible pero no se apreciaba ninguna mancha en el mar. Puestos en contacto con Salvamento Marítimo, se les confirmó que era habitual que cuando empezaban a subir las temperaturas apareciera olor a gasóleo de restos que pueden quedar en la superficie del mar.