Meiro celebra del 22 al 24 los actos del millo corvo, pero sin fiesta gastronómica

Las actividades se abrirán con la muiñada en O Canudo - La temporada pasada no se realizó siembra y no hay cosecha

La Asociación Meiro recibió en diciembre el premio Cacarexo.  // C.G.

La Asociación Meiro recibió en diciembre el premio Cacarexo. // C.G.

DAVID GARCÍA - BUEU

El millo corvo de Meiro será fiel a su cita del mes de marzo, pero con algunos cambios importantes. El más relevante es que este año no se celebrará el tradicional Encontro Degustación o fiesta gastronómica, que tenía lugar el domingo y que congregaba a miles de personas. La celebración de esta popular cita estaba en el aire desde hace meses porque el año pasado no se realizó la siembra o sementeira del cultivo, por lo que las fincas quedaron a monte.

Las fechas que inicialmente se manejan para el ciclo de actividades del millo corvo son del viernes 22 al domingo 24 de marzo. La primera jornada se abrirá con la tradicional muiñada en los molinos de agua de O Canudo y que incluirá actuaciones musicales. A medianoche se leerá el conjuro de la queimada y se repartirá entre los presentes la bebida. Además, en el entorno del molino de A Presa se emplazará un puesto de venta de venta de comida.

Meiro celebra del 22 al 24 los actos del millo corvo, pero sin fiesta gastronómica

Meiro celebra del 22 al 24 los actos del millo corvo, pero sin fiesta gastronómica

La programación del fin de semana está todavía pendiente de cerrar, pero la Asociación Cultural Meiro baraja organizar una serie de charlas-coloquio, un foro de debate o talleres artesanales o gastronómicos. Lo que a priori sí que parece descartado es la fiesta gastronómica que se realizaba el domingo bajo la carpa que se montaba en la explanada de la Casa da Aldea.

El millo corvo es un cultivo tradicional recuperado por los vecinos de la aldea de Meiro hace ya quince años y que dio lugar a la celebración del multitudinario Encontro Degustación, en el que habitualmente se agotaban todas las existencias. El ciclo de actividades en realidad es mucho más amplio y la Asociación Cultural Meiro involucró a los centros educativos para divulgar esta tradición. Así, era habitual que los colegios acudiesen a participar en las diferentes etapas del cultivo, como la siembra, la recogida, la corta y empalleirado o el proceso final en el que se obtenía la harina para cocer el pan.

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