Guillermo Cordeiro aparece solo en las grandes ocasiones. El jueves habrá oportunidad de verlo en un juzgado, aunque no por el delito del que fue acusado y por el que permaneció en prisión preventiva, sino por su empeño en no dejar el control del Club Náutico Rodeira. Su persona de confianza Roberto Núñez manifestó que los acusados se hicieron con el control del club en una asamblea que se convocaba para aprobar las cuentas y presentar los presupuestos y las memorias deportivas. Asegura que Ferral y los suyos invitaron a los discrepantes a abandonar la asamblea y que no quedaron más que 28 socios, de un total de 580, menos del 5% "lo cual da una idea de su representatividad y son las mismas que, desde hace cinco años, vienen perdiendo sistemáticamente las elecciones para presidir la junta directiva del club. Esta imposibilidad de acceder al a dirección por medios democráticos parece que le les ha impulsado a adoptar actuaciones de fuerza", señalaba Roberto Núñez cuando anunció la demanda.

El equipo de Humberto Ferral siempre denunció la manipulación del censo electoral por parte del equipo de Guillermo Cordeiro.