Una avería en el bombeo provoca nuevos vertidos fecales en Vilariño

Una nueva avería en el pozo de bombeo de Vilariño provocó ayer vertidos al mar de aguas fecales que deberían tratarse en la depuradora de Balea. Los vecinos achacan el suceso a la falta de mantenimiento por parte de la concesionaria, Aqualia, ya que al menos dos de las tres máquinas de bombeo estaban paradas, y miembros de la asociación Pedra Amarrada dieron aviso al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil para que investigue los hechos.

El rebosadero actúa cuando en caso de avería o cuando el caudal de agua es excesivo debido a las fuertes lluvias, lo que no ha sucedido en los últimos días. Los residuos causan fuertes olores y van al mar en pleno núcleo de población. Los vecinos ya denunciaron recientemente otros vertidos a un riachuelo en O Lagar que iban a parar a la laguna de Vilariño.