Los amantes del séptimo arte no defraudan a la tercera edición del Festival Internacional de Curtametraxes de Bueu que aumenta su seguimiento. El aforo de 250 plazas del centro social do Mar volvió a ser insuficiente la noche de ayer, igual que ya pasara la noche inaugural. Más sillas en los pasillos y personas sentadas en la moqueta provocó que la organización necesitase imprimir unas cincuenta entradas más para que nadie se quedara sin votar al terminar la sesión.

Ayer se proyectaron Eggbaby, Una caja de botones, Stanka se pribira vkashiti, Dreaming a whole life y Lo siento, te quiero. Con tres trabajos españoles, uno estadounidense y uno más búlgaro el centro social volvió a necesitar las sillas adjuntas aunque ninguno de los directores hizo presentación.

Esta noche se proyectan Los minutos, las horas(Cuba/Brasil)–dirigida por Janaína Marques, este año, fue presentada en el Festival de Cine de Cannes–, March rhapsody (Taiwan/Macao), Laufende geschäfte (Alemania), Pablo –ganador del XI Concurso Iberoamericano de Cortometrajes Versión Española- SGAE– y el también español Las cinco muertes de Ibrahim Gonsález. Será la sesión más internacional de todo el festival y contará con la presencia de los directores de March rhapsody, estudiantes de Comunicación Audiovisual que vienen desde Taiwan y Macao para observar la reacción del público ante su trabajo.

La mayoría de los directores de los cortos comenzarán a llegar a Bueu el viernes y el sábado para acudir a la entrega de premios que cerrará el festival. El centro social abrirá sus puertas a partir de las nueve de la noche, los visionados comienzan, según lo previsto, media hora después.