La ceremonia da comienzo con el lanzamiento de cohetes y las venias a San Sebastián y a la Santa Cruz, ante cuyas imágenes se inclinan seis veces los danzantes. Suena la gaita y el tamboril y se inicia la procesión alrededor del atrio, donde los diez galanes con sombrero e indumentaria negra, y cinco damas (hasta hace medio siglo interpretadas también por hombres) ataviadas con vestidos blancos y sombreros de flores con cintas que simbolizan la fertilidad, hacen sonar sus castañuelas. Juntos, danzan sin dar la espalda al santo y a la virgen del Carmen, que lo acompaña, hasta finalizar el circuito. Bajo el olivo centenario y ante la mirada atenta del busto de monseñor José Cerviño inaugurado el 16 de setiembre, festividad de San Cibrán, continúa la ceremonia, que dura unos tres cuartos de hora y finaliza con una muiñeira a modo de contradanza.

No hay consenso sobre el origen y significado del ritual, que se relaciona con un carácter votivo, de auxilio ante la enfermedad, y la nobleza local. Los danzantes eran vecinos ofrecidos al santo, por iniciativa propia o de sus familiares, en cumplimiento de una promesa, aunque luego se incorporaron miembros que participan porque les gusta. La Asociación Cultural San Sebastián recauda por la parroquia el dinero para cubrir los gastos, entre los que se incluye la tradicional cena de la víspera.

Aunque el sentimiento religioso y la identificación popular con la danza se mantienen, la presencia de público ha sufrido un sensible retroceso, según coincidieron en señalar varias de las personas presentes, que no aciertan a identificar los motivos, si bien el tiempo desapacible y la coincidencia de la festividad en jornada laboral son dos factores que contribuyen a mermar la asistencia. “É certo que non todo o mundo quere vir, pero tamén que non todos os que queren vir poden facelo”, razonaba una veterana seguidora, acompañada de otras mujeres que compartían esa opinión. No faltaron, sin embargo, un buen número de fotógrafos y de cámaras de televisión, y la TVG realizó conexiones en directo. En representación del Concello sólo acudió la edil de Turismo, Mercedes Giráldez, que estos días estará en la feria de turismo Fitur, de Madrid, promocionando las danzas ancestrales del municipio.

Promoción turística

Las danzas de Aldán, Darbo y O Hío estarán representadas en el stand del patronato provincial Rías Baixas, que apenas experimentará modificaciones con respecto al año anterior para “ahorrar en gastos de diseño y creación”, explican desde la Diputación, y destacan que el turismo es el sector “que mejor ha resistido la crisis económica”. En la feria madrileña, el escaparate provincial acogerá la promoción de 25 eventos. Además de las danzas de Cangas, se presentarán el camino a Santiago por la costa, el albariño de Cambados o el Corpus de Ponteareas.