El pazo de Vista Alegre vuelve a estar de luto. Familiares y amigos de María del Mar Beriquistain Díaz, se desplazaron ayer hasta la casa solariega de Aldán para dar el último adiós a la viuda del heredero de la casa, Ramón Gil González de Careaga, cuyo cuerpo fue encontrado sin vida el lunes por una empleada de hogar en el interior de la vivienda. Ayer se le practicó la autopsia en el Hospital Provincial de Pontevedra, por orden del titular del Juzgado número 1 de Cangas, de guardia ese día, aunque todo apunta a que la muerte de esta mujer fue por causas naturales ya que la Guardia Civil no constató signos de violencia. La familia no quiso ayer declaraciones sobre un hecho que consideran íntimo.

El pazo de Vista Alegre es más que una casa solariega, que ha pasado de herederos a herederos, ya que guarda buena parte de una historia de Aldán, que hasta ahora no tuvo taquígrafos. Cuentan que en ella se encontró un testamento de uno de los condes, José María Pérez Armada, con un legado a sus criados y ahijados que nunca vio la luz.

Muchos son los vecinos que recuerdan a los condes de Canalejas o condes de Aldán, los hermanos José María, Antonio y Ramón Pérez de Armada, que murieron sin descendencia. El pazo de A Torre, a poco metros de Vista Alegre, es fiel testigo de aquella vida de hidalgos. En A Torre sigue residiendo su propietaria Fuencisla Roca de Togores, viuda de Antonio Pérez Armada, y heredero del título, con quien se casó en segundas nupcias y que a su fallecimiento, por enfermedad, legó el título a su único hermano con vida, Ramón, el señor de Vista Alegre. El otro de los hermanos, José María, fue consejero delegado del banco Hijo de Olimpio Pérez, fundado por su padre Julián Pérez Esteso. El banco sería después Banco de Crédito e Inversiones y Banco Gallego, como sigue ahora. En Aldán precisamente sobrevive una sucursal, que ya es histórica. José María era uno de los condes más apreciados en Aldán dado su carácter emprendedor.

Según los vecinos, Julián Pérez Esteso se casó con una mujer asturiana, Carmen Quiroga Armada, de donde procedería el linaje de los Canalejas. El matrimonio tuvo cinco hijos, aunque Julián y Carmen murieron de jóvenes. La saga la continuaron José María, Antonio y Ramón