Miembros del Comité de Empresa y de la Junta de Personal respaldan a los seis Policías Locales del servicio nocturno, que denunciaron al ex edil del PP, Nardo Faro Lagoa (ahora en la filas de UPAC) por acoso laboral. Representantes sindicales del Concello de Cangas manifestaron ayer su intención de estar presentes en el Juzgado Penal número 1 de Pontevedra con el fin de mostrar su solidaridad con estos trabajadores municipales en un proceso que se inició a finales del año 2001 y que fue fundamental en devenir de la carrera política del hoy líder de UPAC, Nardo Faro Lagoa. Los policías que demanda al ex edil del PP pide una indemnización de 6.000 euros cada uno.

Faro Lagoa rechazó la semana pasada y ayer realizar cualquier comentario sobre este proceso judicial. Sólo dijo que hablaría del mismo cuando los tribunales fallaran. La acusación cita a declarar a policías locales y a varios periodistas, con una total ausencia de cargos de carácter político en esta lista. En el momento de los hechos, Faro Lagoa era el concejal encargado de la Policía Local. El 8 de noviembre de 2001 comenzó su campaña contra algunos agentes y dijo que "algunos policías quieren cobrar sin trabajar , no consentiré críticas de unos señores que están cobrando sueldos elevadísimos de más de 200.000 pesetas al mes, con sesenta días de vacaciones al año y quince días de trabajo mensual... Estos agentes se permiten el lujo de ir a cenar a sus casas en el coche de la Policía, y les acuso de abandono de servicio. No permito que algunos policías duerman durante el servicio ni que utilicen el coche para ir al bar". Las manifestaciones del ex concejal popular continuaron por el mismo camino en el acto de conciliación, desacreditando, en opinión de la acusación, tanto profesional como personalmente a los policías. También figura en el sumario las declaraciones que realizó a una televisión local de O Morrazo: "o alcalde e máis eu hemos pescado a dos policías nun bar mirando o fútbol; a Policía e para patrulla o pueblo e non para estar metidos en bares como están metidos, é de vergonza que non se mire a un policía patrullando pola calle".

Ataques de ansiedad

Dos agentes, de los que interponen la denuncia, estuvieron de baja laboral, con cuadro de ansiedad, que a tenor del informe de la acusación particular es consecuencia de "acoso al que venían siendo sometidos por el acusado, incluso antes de realizar cualquier tipo de declaración pública, siendo ello, además, un indicio de la presión a que venían siendo sometida la plantilla".

Considera la acusación que el efecto buscado por el autor de las declaraciones es el rechazo social de la Policía Local en general y de la nocturna en particular, formada íntegramente por los querellantes".

La acusación reclama la historia penal del ex edil

La acusación pide, además de 6.000 euros de indemnización a cada uno de los agentes, que se imponga al acusado una multa de catorce meses a razón de 300 euros diarios y la responsabilidad personal subsidiaria de un día de privación de libertada por cada dos cuotas diarias no satisfechas, accesorias y las costas, "dado el muy elevado nivel de vida y de ingresos del querellado y del abuso de superioridad con el que que ha realizados sus declaraciones". También se solicita que se libre oficio a la Policía Local o, en su caso, a la Policía Judicial, al objeto de que proceda a averiguar la capacidad económica del acusado tanto de ingresos como del patrimonio. Se solicita se libre el oficio oportuno al Registro Central de Penados y Rebeldes para que se aporte a autos la hoja histórico-penal.