El gobierno local facilitará la legalización de los establecimientos hoteleros que en estos momentos funcionan en Cangas de forma irregular, por falta de algún tipo de licencia o licencia definitiva. La mitad de los hoteles (seis figuran en la relación desde el año 2002) carecen de licencia de obra o de apertura o están pendientes del visado del proyecto. El alcalde cangués, José Enrique Sotelo, es reacio a mantener una actitud de dureza con el sector y ayer tendió su mano para que entre todos se ponga fin a una situación anómala que hace peligrar el turismo de Cangas y también de la comarca de O Morrazo. El gobierno local trabaja para normalizar un sector que puede llegar a ser fundamental en la economía canguesa, por eso también deja claro que no pondrá "atrancos" para legalizar los establecimientos hoteleros. La situación se remonta a hace más de una década y el gobierno del Partido Popular, según Sotelo, ha procurado poco a poco que los hoteles cumplan con los requisitos legales exigidos.

En el supuesto de que en los establecimientos hoteleros que no están en regla surja un accidente, el Concello de Cangas es responsable subsidiario por haber permitido que continuara una actividad para la que no tienen licencia definitiva. De ahí también el interés de las autoridades locales en que que todo se normalice, no sólo en los hoteles, sino también en hostales y campings.

De momento, la oposición municipal no hizo ninguna mención tampoco a la situación. Tanto BNG como PSOE, y también la FPG tuvieron responsabilidades de gobierno en Cangas y se encontraron también con situaciones como las que ahora se denuncian. Fue el baile para mayores organizado por Vicepresidencia en el hotel As Vegas el que puso al descubierto las anomalías que había en el sector. Algunos de los establecimientos pendientes de regularizar su situación ya se dirigieron a las autoridades locales con el propósito de solicitar asesoramiento para obtener la licencia que les falta, que en algunos casos es un mero trámite, aunque, en otros, es el nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal el que tendrá que poner orden.

De momento, el Concello de Cangas prefiere no hablar de sanciones ni medidas coercitivas, sino que espera que la solución llegue a través de diálogo.