CRUCEIRO 1 - 1 LARACHA

CRUCEIRO

Soliño, Pablo, Pasu, Martín, Jaime, Conde (Edu, minuto 80), Javi (Rodri, minuto 65), Fran, Carlos Palmás, Óscar García, Raúl.

LARACHA

Casal, Cano, Torrente, Míchel, Juan, Dani, Lucas (Nando, minuto 95) Chollas, Rubén (Adrián, minuto 74), Urko, David (Altolaguirre, minuto 89).

ÁRBITRO: Rubén Rodríguez del colegio de Vigo. Amonestó a los locales Fran, Rodri, Carlos Palmás y Raúl, y a los visitantes Chollas, Urko y expulsó con roja directa a Torrente en el minuto 92.

GOLES: 0-1, minuto 50: Dani. 1-1, minuto 91: Carlos Palmás, de penalti.

INCIDENCIAS: Partido disputado en el Javier Guimeráns. Buena entrada.

T.P.M. / Cangas

El Cruceiro evitó, con un gol en el descuento, lo que hubiese sido una derrota muy dañina para sus intereses de permanencia, frente a uno de los rivales directos. La trascendencia del choque parecía haber atenazado los músculos y nublado las ideas de ambos contendientes, que ofrecieron un espectáculo más bien discreto, con pocas ocasiones de gol y con fases de juego anodinas.

En la primera mitad, la única aproximación con cierto peligro a una de las área tuvo lugar después de un malentendido de Soliño y Martín, que a punto estuvo David de aprovechar, con un disparo que propició las protestas de los visitantes al entender que el defensa local había despejado con la mano dentro del área.

En el inicio de la segunda parte, el Laracha salió más enchufado al partido, y después de tres saques de esquina consecutivos Dani ponía por delante a su equipo con un remate de rodilla en el segundo palo. Con la ventaja en el marcador, el conjunto de José Luis Vara intentó llevar el partido a su terreno, imprimiéndole un ritmo lento y con continuas interrupciones que exasperaban al conjunto local.

El Cruceiro cayó muy pronto en la precipitación y era incapaz de hilvanar jugadas de peligro. La primera ocasión clara del partido favorable a los locales tuvo lugar en el minuto 83 con un mano a mano de Raúl con Casal en la que el cancerbero le ganó la partida al delantero cruceirista. En los minutos finales, más con ímpetu que con claridad de ideas, el Cruceiro logró encerrar al Laracha en su área hasta que el colegiado señaló penalti por empujón a Martín. El hombre encargado de asumir la responsabilidad fue Carlos Palmás, que batió a Casal y dio a su equipo un empate que se considera bueno.