Un marinero de Cangas desaparece en Uruguay en extrañas circunstancias

Autoridades y cuerpos de seguridad uruguayos buscan al marinero cangués Ángel Soliño Chapela, de 49 años, de-saparecido el pasado viernes en la capital de Uruguay, Montevideo. La pista del morracense se perdió en la misma jornada en la que estaba prevista la partida del barco en el que estaba enrolado, el Baffin Bay, hacia Galicia.

El buque, que faena en Malvinas, tiene bandera inglesa pero

-según pudo saber este periódico- descarga la pesca en una compañía del puerto de Marín. Fundamentalmente, captura merluza y calamar, según indicó Manuel Barros, director de Barros Agencia Marítima, la naviera que representa al buque inglés en tierras uruguayas.

Crónica de una jornada

Barros, un gallego de A Estrada, explicó que el barco recaló en Montevideo el día 6 a las nueve de la mañana para reponer combustible. El capitán del navío tenía previsto partir a 7.00 horas del día siguiente. Como medida de gracia, dio la jornada libre a los marineros que celebraron una cena juntos esa misma noche fuera del barco.

Al finalizar el festejo, Ángel Soliño, según el propio testimonio de Barros, volvió junto a un compañero hacia el puerto. Eran alrededor de las cinco de la mañana del día 7. Al llegar, se le requirió que presentase el pase necesario para acceder a la zona portuaria además de someterse a la toma de una foto. Barros señala que se trata de un proceso de "seguridad" utilizado en la autoridad portuaria para impedir que personas ajenas puedan entrar en ella. En el momento de la fotografía y por causas que no fueron desveladas, Soliño Chapela se molestó y "tuvo unas palabras" con una funcionaria.

El encontronazo hizo que un comandante de la guardia lo detuviese. Tras prestar declaración, se aclaró su situación y se le dejó libre. Desde la Agencia Marítima, relatan que "le preguntaron si quería que lo llevaran hasta el barco pero él dijo que no". Ése fue el último momento en el que se vio a Soliño Chapela.

Desde entonces, se inició una búsqueda hasta que ayer se publicó un anuncio de su desaparición en diarios uruguayos para ayudar a encontrarlo. La empresa teme que pudiera caer al mar o que fuese asaltado por ladrones ya que portaba unos "900 euros".