La brigada de obras del concello buenense intensificó su trabajo en estas últimas semanas con el objetivo de finalizar las mejoras pendientes en los colegios del municipio de cara al comienzo del nuevo curso académico en el mes de septiembre. Además, está llevando a cabo la limpieza y el acondicionamiento de los recintos escolares de la localidad con el fin de que alumnos y profesores se encuentren los centros en las mejores condiciones posibles.
Entre las actuaciones que los trabajadores municipales tienen proyectadas destaca la construcción de un almacén en el colegio de la parroquia buenense de Beluso que se usará para albergar el material deportivo. Esta obra se hizo necesaria después de que el cuarto que cumplía esta función hasta el momento fuese destinado a acoger la nueva aula de informática del centro.
Asimismo, procederán a levantar un cierre de piedra en el colegio de educación infantil de Curraces. Desde el concello se aseguró que estos trabajos estarán finalizados la próxima semana. Aunque estaba previsto que esta obra se realizase cuando la escuela-obradoiro construyó en el lugar dos aulas destinadas a albergar las actividades de psicomotricidad, finalmente la actuación no se llevó a cabo.
Otra de las obras a las que el gobierno local da prioridad de cara al inicio del nuevo curso escolar es el acondicionamiento del terreno situado detrás de las viviendas de los profesores en el colegio A Pedra de Cela para que acoja un nuevo aparcamiento.
Esta actuación se hace necesaria porque los profesores del centro educativo buenense no pueden aparcar dentro del recinto debido a las obras de construcción del gimnasio. De esta forma se pretende habilitar un espacio específico para que los tutores puedan estacionar sus vehículos.
A buen ritmo
En cuanto a los trabajos de construcción del nuevo gimnasio del colegio A Torre de Cela, la alcaldesa buenense, Elena Estévez, aseguró que las obras "van a buen ritmo, tal y como me comentó el propio director del centro".
Estévez Freire recordó que el plazo de ejecución que establece el contrato es de cuatro meses, "aunque nuestra intención es que no haya máquinas pesadas en el lugar cuando comience el curso".
