Está demostrado que el ejercicio puede mejorar la respuesta inmune del organismo, protegiendo a las personas de muchas infecciones virales, incluyendo la gripe, los rinovirus (causantes del resfriado común) y los virus relacionados con el herpes. Extrapolando este hecho, el deporte puede incluirse en la lista de aliados para luchar también contra el Covid-19.
Tal y como subraya Richard J. Simpson, profesor asociado en los departamentos de Ciencias de la Nutrición, Pediatría e Inmunología de la Universidad de Arizona y miembro del Colegio Americano de Medicina Deportiva (ACSM), "el sistema inmune humano es una red altamente complicada de células y moléculas diseñadas para mantener a una persona libre de infección y enfermedad y se sabe que el ejercicio tiene un impacto profundo en el funcionamiento normal de dicho sistema inmune".
También subraya que el distanciamiento social y el confinamiento que hemos padecido durante la pandemia tienen graves efectos sobre el sistema inmunitario; ya que hormonas como el cortisol (una hormona estresora) afecta negativamente en dicho sistema. Para paliarlo tenemos, entre otros recursos, el ejercicio físico.
Además, según el doctor Zhen Yan, investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad de Virginia, el ejercicio físico tendría un efecto protector en el desarrollo del Covid-19. Tras una detallada investigación médica, cuyos resultados fueron publicados en la revista 'Redox Biology', afirma que "el ejercicio puede prevenir o al menos reducir la gravedad del síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA), que afecta a entre el 3 y el 17 por ciento de todos los pacientes con Covid-19".
"El distanciamiento social o respiratorio no es lo único que podemos hacer para evitar la exposición, o depender de un respirador para sobrevivir si nos infectamos. El ejercicio regular tiene muchos más beneficios para la salud de lo que creemos saber", sostiene Yan.
"La pandemia del coronavirus nos ha hecho reflexionar mucho sobre nuestros hábitos de vida en nuestro día a día. No solo nos hemos replanteado las medidas de protección frente al virus, sino también las medidas para prevenir los problemas de salud a través de la práctica regular de ejercicio físico", sostiene Jorge Torres, gerente de VIGOENTRENA y experto universitario en ejercicio físico en supervivientes de cáncer de mama.
"Los principales consejos para estar mejor y más preparados frente al Covid-19 han sido muchos; cuidado de la dieta, ejercicio físico, reducción de estrés...", indica. Pero lo que está demostrado es que "la práctica deportiva tiene una fuerte evidencia científica como agente para prevenir patologías y mejorar nuestra salud", añade.
Basándose en literatura científica de autores como Zhay, J. Siuchi, V. Guadaghi, S.H.J. Biddle, Jenkins o Hermann Zbiden-Foncea, enumera las razones por las cuales se debe realizar ejercicio físico "para un buen estado de salud general":
1. Ansiedad/depresión: "El miedo derivado de la incertidumbre durante la pandemia nos genera un estado de ansiedad que afecta a nuestra seguridad personal y laboral, generando un desasosiego que puede afectar a nuestro estado de ánimo general, que puede llegar a acabar en depresión. El ejercicio físico es un potente antidepresivo natural, ya que genera altos niveles de dopamina durante su práctica que nos ayudará a mantenernos positivos, optimistas y con mayor fortaleza mental ante la adversidad. Actuará como "vacuna" ante futuros estados de ansiedad o depresión", afirma Torres.
2. Beneficios cardiovasculares: "Durante el confinamiento se ha limitado mucho nuestra capacidad de caminar o hacer ejercicio. Los beneficios del ejercicio moderado son eficaces para mejorar la salud cardiovascular y por ello es beneficioso para prevenir patologías cerebrovasculares o cardiovasculares. Garantizar un buen funcionamiento del sistema cardiovascular nos ayudará a prevenir patologías en circunstancias convencionales, y más aún con el coronavirus, que tiene como una de sus complicaciones graves las trombosis venosas".
3. Capacidad pulmonar: "Realizar ejercicio físico supervisado de forma regular reduce el número de hospitalizaciones de pacientes con problemas respiratorios. El Covid-19 puede derivar en neumonías o fibrosis pulmonares. En este contexto, el tabaquismo debe ser reducido al máximo, e incluso es un momento ideal para dejarlo".
4. Reducir y controlar el sobrepeso: "Los individuos con sobrepeso son más proclives a tener problemas cardiovasculares. Tienen mayor propensión a formar ateromas, que pueden desembocar en isquemias agudas".
En relación al Covid-19, se ha detectado una predilección de este virus por estos individuos, así como por los diabéticos. Ziben-Foncea lo atribuye a la inflamación crónica de "bajo grado" que padecen estos pacientes, que se caracteriza por el aumento de determinadas hormonas "pro inflamatorias", como son las citoquinas. Según apunta, "el ejercicio cardiorespiratorio genera una cierta inmuno-protección frente al Covid-19, al atenuar el "síndrome de tormenta de citoquinas" que experimentan los individuos de riesgo".
5. Aumento de las defensas del organismo: Zbiden-Foncea explica una "acción protectora" del ejercicio moderado frente al Covid-19, actuando como 'inmuno protector'". "Actualmente el ejercicio físico está considerado medicina, y su práctica, una polipíldora de la salud general", resume Jorge Torres.
"Durante el ejercicio los músculos producen unas moléculas que reciben el nombre de mioquinas, y está demostrado que dichas moléculas previenen enfermedades y conforman una especie de "estación de recarga" para nuestro sistema inmunitario", subraya Andrés Viana, técnico del Máis que Auga Coia en la web del centro. "De este modo, fortalecer la musculatura no solo mejora la fuerza, sino que también estimula las defensas y mejora la forma física", añade: "Tener un sistema inmulogócico fuerte es fundamental para combatir cualquier virus y también puede tener efectos positivos en otras enfermedades".
"El ejercicio físico es un gran aliado a la hora de reforzar nuestro sistema inmunológico", asegura el coordinador técnico en Máis que Auga Marcos Alonso. "Lo que mejor nos vendrá será un ejercicio moderado, no es necesario un ejercicio extenuante ni de alta intensidad, pero debe realizarse de manera regular; no nos vale con venir uno o dos días al gimnasio sino que las recomendaciones son de 150 minutos de ejercicio moderado a la semana", indica.
"El ejercicio, además, va a provocar una mejora en los niveles de estrés que está muy relacionado también con el sistema inmunológico", añade Alonso.
En el centro de Coia del Máis que Auga han introducido a su circuito eGym el programa Immunity Boost. "Se trata de unas máquinas diferentes a todo lo que hay en los gimnasios convencionales, a las que, en la reapertura tras el confinamiento, les hemos añadido este programa para reforzar el sistema inmunológico", explica. "Su característica principal es que reduce un poco ese estrés que puede provocar el ejercicio con pequeñas pausas entre las repeticiones para que se refuerce ese sistema inmunológico sin tener un estrés excesivo, que podría provocarnos todo lo contrario", prosigue. Se trata de un programa "recomendado para todo el mundo", aunque apunta que les resulta muy "cómodo en personas que no tienen una condición física demasiado buena porque la máquina se adapta a las circunstancias de cada uno". Tras un test inicial y una prueba de esfuerzo, "se ajusta de forma automática al usuario por lo que lo recomendamos en muchos casos a esas poblaciones que no tienen tanto conocimiento del ejercicio o que la ejecución no es demasiado buena porque la máquina te guía en todo momento y es muy fácil de usar".
"Durante un tiempo se pensó que los gimnasios éramos un foco de infección o de riesgo pero, tomando las medidas oportunas, estas actividades nos van a beneficiar, ya no solo a nivel inmunólogico, sino también nivel cardiovascular y muscular", aspectos que en algunos casos han empeorado en la cuarentena.
