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Abet: "No diré donde compré el arma, no quiero comprometer a nadie más"

La investigación se focaliza en el origen del revólver -Su precio, unos 600 euros en las armerías, se triplica en el mercado ilegal

Entorno en el que se produjo en asesinato. // N. Parga

"No voy a decir donde compré el arma, no quiero comprometer a nadie más". José Luis Abet, que tras cometer el triple crimen machista de Valga el lunes huyó a casa de su madre en la localidad coruñesa de Ames, desde donde a media mañana llamó a la Guardia Civil para confesar la barbarie cometida y decir onde podían ir a detenerle, se cerró en banda a la hora de facilitar datos sobre cómo había conseguido el revólver con el que que descerrajó 15 tiros para matar a su exmujer, Sandra Boquete;_su excuñada, Alba, y su exsuegra Elena Jamardo, delante de sus dos hijos de corta edad.

Ya por la tarde y en dependencias del Instituto Armado, facilitó a los investigadores el lugar donde había tirado el arma, con la que residía desde que año y medio atrás se divorció de Sandra_Boquete. Pero se negó reiteradmente a dar exlicaciones sobre quien o dónde adquirió el arma, recuperada en el río junto con una caja de munición.

La investigación se focaliza ahora en el origen del revólver, del calibre 32, con el número de serie borrado y de muy buena calidad. No se trata de un arma modificada, algo que suele ser habitual con las que se compran en el mercado negro en Portugal. Su precio de adquisición de forma legal en españa, con licencia, ronda los 600 euros, pero se triplica en el mercado ilegal, según expertos consultados por FARO DE VIGO.

Además de la procedencia del revólver, la investigación se centra en afianzar el delito de asesinato que la para ello es necesario demostrar que hubo planificación par aperpetrar el crimen, que las víctimas no tuvieron posibilidad de defensa y si se causó un sufrimiento innecesario.

Toman testimonio preconstituido a los niños para evitarles declarar en el futuro juicio

No llevaba ni 24 horas en prisión cuando José Luis Abet Lafuente fue trasladado a primeras horas de ayer desde A Lama al Juzgado de Instancia 2 de Caldas, especializado en violencia sobre la mujer; el mismo en el que la víspera manifestó no estar en condiciones de declarar y que ordenó su ingreso en prisión provisional por tres presuntos asesinatos.

En esta ocasión fue citado para asistir a las diligencias de prueba preconstituida ordenada por la jueza para recoger el testimonio de sus dos hijos, de 4 y 7 años, testigos del brutal asesinato a tiros de su madre, su tía y su abuela en el domicilio familiar de Carracido.

Esta prueba evita que los pequeños tengan que asistir al futuro juicio para declarar contra su padre, ya que se dispondrá de la grabación realizada ayer.

La jueza que instruye la causa aprovechó la ocasión para comunicar al investigado que se le suspende la patria potestad sobre los pequeños, que viven temporalmente con familiares maternos. La titular del juzgado tendrá que decidir en los próximos días quién se hace cargo de su custodia.

Los niños no coincidieron en ningún momento en la sede judicial con su padre, sino que estuvieron en una sala aparte y un grupo de expertos se ocupó de su "exploración" o toma de testimonio. Su progenitor se encontraba en otra sala y se impidió también cualquier contacto visual de los niños con él.

José Luis Abet abandonó la cárcel de A Lama sobre las 8.30 horas custodiado por la Guardia Civil camino del juzgado de Caldas. Al finalizar las diligencias judiciales, regresó a prisión. Tras su ingreso en el penal en condición de preso preventivo se le ha ubicado en la enfermería, permanece aislado del resto de internos, con la única compañía de un preso "sombra" que le vigila y se le ha aplicado el protocolo antisuicidios.

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