Placeros y vendedores del mercadillo de Vilagarcía protagonizarán hoy a las 12.00 horas una cacerolada para mostrar su más absoluto rechazo con el planteamiento del gobierno local de reubicar los puestos de Alexandre Bóveda, avenida de A Mariña y Doutor Carús en el parque de A Xunqueira, alejando así la feria de la plaza de abastos. Aunque hasta mañana el Concello no dará a conocer el emplazamiento definitivo, ambulantes y placeros unen sus fuerzas para hacer presión y lograr que la administración municipal rectifique.
Los comerciantes hacen un llamamiento a la ciudadanía para que también participe en la protesta que se celebrará este mediodía frente a los puestos de Alexandre Bóveda, ya sea haciendo "sonar los cláxones de sus vehículos o simplemente dando palmas".
La asociación de placeros celebró ayer por la mañana una reunión a la que asistieron tanto vendedores del mercado, como ambulantes del mercadillo y alguna agricultora de la nave de la verdura. Allí se decidieron las medidas de protesta, a la que hay que sumar una especie de huelga, ya que mañana "no abrirán los puestos y tiendas de la plaza de abastos de Vilagarcía y los comerciantes saldremos por las calles de la ciudad a informar a la ciudadanía de la injusticia que estamos sufriendo. También realizaremos una recogida de firmas para buscar el apoyo de nuestros conciudadanos y buscar una solución a una crisis que hace peligrar el sustento de más de 300 familias", explican desde el colectivo.
Los vendedores reiteran su "asombro y descontento de una medida que dinamitaría una de las actividades más emblemáticas de Vilagarcía, un mercado que comenzó en el año 1929 y se ha convertido en un referente de nuestra ciudad. Nos sorprende que así lo defienda y promueva el propio Concello en su web de turismo mientras realiza acciones que claramente perjudican su futuro. Se trata de un mercado por el que lucharon nuestros abuelos, que mejoraron nuestros padres y que ha ido pasando de generación en generación hasta formar parte de la historia de nuestra ciudad", reivindican los placeros.
Los feriantes prefieren quedarse en Alexandre Bóveda, sin tráfico, como hasta ahora, pero ante la negativa del Concello, plantearon la posibilidad de trasladarse a Castelao, Plaza de Galicia y Rey Daviña.
