Llega el turno de las dársenas comerciales. A punto de adjudicar el proyecto de ampliación de la terminal de vehículos de Bouzas (65.000 m2 de superficie, 1.300 metros lineales de atraque y 50 millones de presupuesto), la Autoridad Portuaria ya tiene en mente una obra de similar envergadura para el muelle Transversal. Aumentaría la superficie en 56.000 m2 por medio de una extensión de su cabecera 183 metros hacia el Oeste (Estación Marítima) y otra alineación orientada hacia el espigón del Náutico de 221 metros unida al extremo de Comercio. Este muelle acabaría desapareciendo, pero la pérdida de atraque se compensaría con los 100 metros más ganados hasta rondar los 800 en total. Y lo que más importa a las empresas: toda la línea de amarre ofrecería un calado homogéneo de 15 metros, no como ahora que baja en ciertos tramos hasta 9. Una solución que solventaría las estrecheces que padecen en la actualidad para mover el ingente volumen de aluminio y granito que entran por este ámbito, aunque este no es el único objetivo de la Autoridad Portuaria. La longitud del atraque está pensada también para los cruceros.
En la reciente reunión con los operadores donde expusieron el ambicioso plan, directivos de la Autoridad Portuaria insistieron en que "está abierto a sus sugerencias". Varios de los presentes, caso de Kaleido Ideas & Logistics y Alfacargo, ofrecieron ya al instante algunas: desde adosar un rectángulo al oeste del Transversal para conservar al menos una parte del muelle de Comercio, hasta abordar la ampliación solo desde la cabecera del primero. Este debate no deparó resultados concreto sobre la configuración del nuevo relleno. "No hay nada definitivo", seguían remarcando ayer fuentes portuarias.
Beneficia a empresas y ciudad
Esta cautela responde al hecho de abordarse en la zona que acabó descartada, por la contestación ciudadana, del proyecto que aumentó la superficie de la dársena contigua, en Areal. También por esta razón Praza da Estrela quiere rescatar ahora la idea promoviéndola como una ampliación versátil. Que sirva para retener tráficos de mercancía general por falta de espacio y al mismo tiempo remonte otro más amable, de claro beneficio para la economía de la ciudad: el crucerístico.
Cercanas a la otra terminal de recepción de estos pasajeros habilitada en El Tinglado, las dos nuevas líneas de traque, una de 221 y otra que añadiendo la actual se situaría en 352, permitirían la estancia de un crucero mediano y otro grande. Así que con los metros de la terminal de la Estación Marítima, Vigo podría recibir a la vez la escala de hasta cuatro, con tres de los más grandes del mundo. Un aumento de capacidad, con calado profundo, que lo colocaría en el punto de mira de las navieras a punto de estrenar buques de 350 metros o superiores.
El planteamiento que afecta al Transversal ya figura en el Plan Estratégico que el Puerto tiene prácticamente cerrado para su presentación el próximo mes. Su argumentación para defenderlo arranca en este documento con un recuerdo crítico a la última gran obra de ampliación de infraestructura portuarias en Vigo, la mencionada de Areal. Ejecutada entre los años 2010 y 2014 aprovecha para incidir, una vez más, en las consecuencias de haber sido construida sobre pilotes. Mantiene que "ha resultado insuficiente para las mercancías aquí manipuladas, pues es necesario una capacidad portante mayor del muelle, mientras que la repercusión medioambiental es prácticamente la misma".
Al margen de este y otros problemas que presenta una superficie de 57.000 m2 que lleva seis años a pleno funcionamiento, en el Plan Estratégico se subraya otra realidad evidente de la que desde hace tiempo vienen quejándose los operadores -en especial, los de aluminio- por lo que considera que "se debe plantear una mayor línea de atraque y mayor explanada". "En estos momentos esta ampliación está totalmente ocupada". Tanto es así que en la reunión con los empresarios estos avanzaron que las alternativas provisionales planteadas, como el aprovechamiento de espacios en los aledaños de El Tinglado, serán "un mero parche". De hecho a algunos de sus más importantes clientes la paciencia se les ha agotado y ya se plantear desviar carga a otras terminales, entre ellas, la de Marín o la portuguesa de Aveiro.
A la hora de elegir las zonas "ampliables", el documento sugiere que la configuración de los muelles comerciales reduce las opciones, aun así, abunda en explicaciones. Dice que las alineaciones del Transversal Oeste y muelle de Comercio "son antiguas y con menos calado", por ello, continúa, "parecería razonable" abordar la ampliación en este ámbito. En todo caso deja "la solución definitiva" a los técnicos que ya están proyectándola en el Plan Director de Infraestructuras.
