Guerra en Ucrania

Ucrania espera la reanudación de las grandes ofensivas tras la entrada del nuevo año

Ambos bandos preparan operaciones de envergadura para tratar de desatascar el conflicto tras semanas de impasse

Imagen de Vladímir Putin en una cruz, situada en Dnipro, ciudad a 391 kilómetros de Kiev, a modo de 'check point'.

Imagen de Vladímir Putin en una cruz, situada en Dnipro, ciudad a 391 kilómetros de Kiev, a modo de 'check point'. / Reuters

Ricardo Mir de Francia

En la estación central de Kiev las luces del árbol de Navidad parpadean como de costumbre por estas fechas. Pero este año no se alimentan de la corriente eléctrica sino de la dinamo de una bicicleta estática a disposición de los pasajeros y las ruedas de un tren eléctrico recuperado de las ruinas de Irpin, una de las localidades de la periferia de la capital severamente bombardeadas durante los primeros meses de la guerra, cuando el Ejército ruso trató de conquistar Kiev. Los bombardeos del Kremlin contra las infraestructuras energéticas mantienen a buena parte del país en la penumbra, con frecuentes cortes de agua, luz y calefacción, pero el celo bélico hace ya semanas que es incapaz de alterar las líneas del frente. El invierno ha embarrado la guerra, pero no será más que un impasse pasajero. 

"Estamos en una especie de punto muerto", asegura el analista Andreas Umland desde el Stockholm Center for Eastern European Studies. "Ninguna de las partes ha lanzado nuevas operaciones ofensivas de envergadura, pero están preparándose para hacerlo. Ambos bandos están debilitados tras estos últimos meses de guerra sin cuartel". A finales de octubre, el Kremlin admitió finalmente que enfrenta serias carencias de armamento para pertrechar a sus militares en Ucrania, una admisión que se suma a la evaluación de la inteligencia británica, que lleva tiempo advirtiendo de la "escasez crítica" de piezas de artillería y misiles de precisión en los arsenales rusos.

Algo parecido le ha sucedido periódicamente a Ucrania por las dificultades que está teniendo la industria occidental para reponer a tiempo la munición quemada en el frente. Este verano los ucranianos dispararon una media de 6.500 piezas de artillería al día, según fuentes de la OTAN citadas por el 'New York Times', frente a las 45.000 diarias de Rusia. En una reciente entrevista con 'The Economist', el general Valery Zaluzhny, el hombre que está dirigiendo la guerra en el bando ucraniano afirmó que la prioridad actual de los suyos pasa por mantener sus posicionesincrementar sus recursos y mejorar las defensas antiaéreas para prevenir los ataques contra el sistema energético. 

Sistema antimisiles Patriot

Un deseo, este último, que satisfará en cuanto lleguen a Kiev las baterías de misiles Patriot prometidas esta semana por el presidente Joe Biden durante la visita de su homónimo Volodímir Zelenski a Washington. "Estoy convencido de que podemos derrotar a este enemigo", dijo Zaluzhny en esa misma entrevista. "Pero necesito recursos. Necesito 300 tanques, 600 ó 700 vehículos acorazados y 500 cañones Howitzer. Con ello, creo que es completamente realista volver a las líneas del 23 de febrero", añadió aludiendo a la víspera del comienzo de la guerra. Desde entonces, Rusia ocupa parcialmente cuatro provincias ucranianas, todas ellas "anexionadas" por Vladímir Putin.

Pero esa pausa invernal no tiene visos de durar mucho. Tanto Moscú como Kiev preparan grandes ofensivas para tratar de desatascar la guerra en los primeros meses de 2023. El Kremlin está siendo bastante más discreto al respecto, como viene siendo la norma, pero son muchos los que piensan que tratará de invadir nuevamente el norte de Ucrania desde Bielorrusia. O por lo menos, creará las condiciones para que sea una opción tan verosímil como inminente. "El objetivo es forzar a Ucrania a redirigir parte de sus militares hacia las fronteras bielorrusas para restarle fuerzas en el Donbás y el frente sur", asegura Tadeusz Iwanski desde el Centro de Estudios Orientales (OWS), con sede en Varsovia.

Nuevo frente desde Bielorrusia

Una lectura similar a la que hace Mijailo Samus desde el New Geopolitics Research Network, con sede en Kiev. "Tratarán de ocupar la central nuclear de Rivne y, al mismo tiempo, cortar una de las rutas logísticas de entrada de las armas occidentales, aunque el principal objetivo de la operación sería obligar a Ucrania a frenar sus contraofensivas en el este y en el sur", dice en una conversación telefónica. Putin lleva tiempo presionando a Minsk para que participe directamente en la guerra, una posibilidad reabierta tras su reciente visita a la capital bielorrusa. En las últimas semanas no dejan de llegar armas y militares rusos al país de Alexander Lukashenko, donde los satélites han detectado nuevos caminos abiertos junto a la frontera ucraniana.

"Lukashenko no quiere mandar a su gente a Ucrania, pero su margen de maniobra es pequeño porque su economía depende mucho de Rusia y su Ejército está tan integrado con el ruso que prácticamente es una extensión del mismo", asegura Iwanski, buen conocedor de la realidad bielorrusa. Por el momento, los expertos coinciden en que el Kremlin no tiene suficientes militares en Bielorrusia para invadir desde allí, ni siquiera si contara con el respaldo del Ejército del viejo dictador. 

Pero también Ucrania está esperando su oportunidad para relanzar las contraofensivas que le han permitido preparar varias regiones en los últimos meses. "Hay tres posibilidades", dice Samus desde Kiev. "Insistir en el Donbás, tratar de romper la continuidad de los territorios ocupados tomando Melitopol y Berdiansk, o cruzar el río Dniéper en la provincia de Jersón". A los ucranianos se les da bien jugar al póker y ya han logrado confundir al Kremlin varias veces sobre sus verdaderas intenciones.

Kiev sigue telegrafiándolas, pero es posible que no sea más que una estrategia de distracción. "Las Fuerzas Armadas de Ucrania no van a detenerse", dijo hace unos días su ministro de Defensa, Oleksi Reznikov. "Cuando el suelo se hiele y se haga más sólido, continuaremos el contrataque y la campaña para liberar nuestros territorios", añadió.

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