El cerco político alrededor Pedro Castillo se estrecha aceleradamente. Nuevas manifestaciones pidieron su dimisión en distintas zonas de Perú, entre ellas Lima. Lo mismo reclamaron dirigentes patronales. Una petición inesperada añadió más gasolina al fuego de la inestabilidad: el Defensor del Pueblo, Walter Gutiérrez reclamó a su vez la renuncia del maestro rural para "comenzar un curso de salida frente a esta grave crisis". La Defensoría del Pueblo le recordó al presidente que en su función de ser garante de los derechos fundamentales de la población, y en virtud del desgaste del Ejecutivo en apenas ocho meses, marcados por 157 conflictos sociales y cuatro cambios de Gobierno, debería dar un paso al costado.

"La renuncia es una forma de solución a la que han acudido exmandatarios cuando han advertido la gravedad de la crisis y comprendiendo que ellos mismos eran un obstáculo para encontrar la salida", se sugiere.

Gutiérrez le reprocha al jefe de Estado "evidentes retrocesos en las políticas públicas producto de acciones y omisiones”" El documento recuerda además que en menos de un año, Castillo nombró a numerosos ministros que no resultaron "idóneos" para ejercer esos cargos o fueron "incompetentes". No han faltado casos de funcionarios vinculados a "ilícitos penales o casos de violencia contra las mujeres". La posibilidad de abandonar la presidencia, añade Gutiérrez, sería, ante todo, "un acto responsable con el país y leal con la Constitución".

El Defensor del Pueblo lo critica además por haber declarado el "estado de emergencia" en la capital y sus populosos alrededores, frente al aumento de las protestas, para luego levantarlo frente a las presiones opositores. La medida no solo fue inconstitucional sino "desmedida" e "irracional".

Ofensiva del Congreso

Con una impopularidad del 76%, Castillo se encuentra cada vez más solo y debilitado. El Congreso intentó en dos ocasiones promover una moción de censura. En la noche del jueves, la legislatura "exhortó" al mandatario a que dimita ante la gravedad de las circunstancias. La iniciativa fue presentada por fuerzas de derecha y acusa a Castillo de demostrar "una total ineficiencia e irresponsabilidad en los asuntos de Estado", así como ejercer un "desgobierno" que tiene como consecuencias un aumento de la inflación y el paro.