El presidente de Rusia, Vladímir Putin, y su ministro de Exteriores, Vladimir Lavrov, ya están en la nueva lista negra de dirigentes sancionados por la UE por su responsabilidad en la invasión de Ucrania. También, en la de Estados Unidos.

Aunque hasta ahora, los Veintisiete se habían resistido a incorporar los dos nombres , la "brutal agresión" de este jueves ha cambiado radicalmente la situación y los Veintisiete han decidido apuntar a lo más alto del régimen ruso. En Washington, mientras, el presidente Joe Biden, que la víspera fue cuestionado por no poner a Putin directamente en la diana de las sanciones anunciadas, ha tomado su decisión "en alianza con los socios europeos", según ha explicado en rueda de prensa la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki.

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Aunque los dirigentes rusos verán sus activos en la UE congelados, sí podrán entrar en territorio europeo. Mientras, en EEUU, el veto de viaje sí ha sido parte de los castigos estadounidenses, aunque Putin podrá acudir a Nueva York para las reuniones de Naciones Unidas, tal y como han hecho en el pasado otros funcionarios de Irán, Venezuela y Corea del Norte sancionados por Washington. El presidente de EEUU, Joe Biden, llevaba semanas evaluando imponer sanciones a Putin, pero tomó la decisión final en las últimas 24 horas después de conversar por teléfono con sus aliados europeos, incluida la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, indicó Psaki. Es extremadamente inusual que EEUU imponga sanciones contra un jefe de Estado o de Gobierno. Washington solo ha usado esa acción en el pasado contra los presidentes de Siria, Bachar al Asad, y Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, así como contra el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, detalló el Departamento del Tesoro en un comunicado.

Además de a Putin y Lavrov, Washington sancionó al ministro ruso de Defensa, Serguéi Shoigú, y al jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, el general Valeri Guerásimov por sus acciones en Ucrania. Como consecuencia de este castigo, quedarán congelados todos los bienes y activos financieros que puedan tener en EEUU los rusos, a quienes también se les prohíbe hacer transacciones con cualquier ciudadano estadounidense, algo que en teoría les dificulta el acceso al sistema financiero internacional basado en el dólar. Sin embargo, se desconoce qué activos pueden tener bajo jurisdicción estadounidense Putin, Lavrov, Shoigú y Guerásimov, por lo que no se sabe el alcance real de las sanciones.

"Responsables de la muerte de inocentes"

"Son responsables de la muerte de personas inocentes en Ucrania y de pisotear el sistema internacional. Nosotros, como europeos, no lo aceptamos", ha explicado la ministra alemana de exteriores, Annalena Baerbock, al término del consejo extraordinario que ha dado luz verde al segundo paquete de sanciones acordado este jueves por los líderes europeos. Durante la reunión de los Jefes de Estado y de Gobierno el jueves no hubo acuerdo para incluir a Putin y Lavrov aunque encargaron al jefe de la diplomacia europea la búsqueda de una solución.

"Hemos trabajado duro", ha dicho este viernes el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, que ha calificado la decisión de "paso importante" aunque sin cuantificar el volumen de activos que ambos políticos puedan tener en territorio europeo. La idea es congelar sus bienes pero no prohibirles la entrada para mantener abiertos los canales diplomáticos y la vía de la negociación. Mientras, en EEUU, Psaki ha asegurado que las sanciones a Putin y Lavrov envían "un claro mensaje sobre la fortaleza de la oposición" a las acciones rusas.

La UE no cierra en todo caso la puerta a nuevas sanciones en un futuro porque "nos enfrentamos a una invasión total de un país, con bombas, asesinato de civiles, confrontación entre dos ejércitos. Es lo peor que ha ocurrido eje Europa desde el final de la 2GM. Nadie sabe qué va a pasar después, nadie saber las verdaderas intenciones de Putin", ha dicho Borrell que ha insistido en que también tendrá que rendir cuentas ante Naciones Unidas. Tampoco EEUU da por agotados sus recursos de castigo y Psaki ha mencionado concretamente la posibilidad de excluir en el futuro a Rusia del sistema de pagos Swift.

555 individuos y 52 entidades

La lista de personas y entidades rusas sancionadas hasta ahora por la Unión Europea incluye un total de 555 individuos y 52 entidades. El pasado lunes los Veintisiete decidieron incorporar a 351 miembros de la Duma rusa que votaron el reconocimiento de la independencia de Donestk y Lugansk así como a 27 individuos y entidades implicados en esta agresión. Este listado, que ya incluye al ministro de defensa ruso, Sergei Shoigu, al jefe de gabinete de Putin, Antoni Vaino, o a la portavoz del ministro de exteriores, Maria Zakharova, seguirá creciendo con la incorporación de “varios cientos de personalidades políticas y económicas de Rusia”, según ha confirmado el ministro de finanzas francés, Bruno Le Maire.

Antes de conocerse que Putin y Lavrov también estarán en la lista de personalidades castigadas, Rusia ha asegurado que responderá "de forma simétrica o asimétrica" a las sanciones impuestas por los países Occidentales. El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha admitido que las sanciones causarán problemas para Rusia, pero podrán solucionarse, ya que el país ha reducido su dependencia a las importaciones extranjeras para protegerse ante esta reacción internacional.

Dos rondas de sanciones

Los Veintisiete aprobaron un primer paquete de sanciones el lunes y ante el deterioro de la situación y el avance de las tropas rusas en Ucrania, los líderes europeos se reunieron de urgencia este jueves para pactar una segunda ronda de sanciones con un objetivo: aislar y hundir económicamente al régimen de Putin. Las medidas de represalia, que aprobarán formalmente este viernes los jefes de la diplomacia europeos, apuntan esta vez a sectores estratégicos para Rusia como bancos, defensa, transporte o petróleo.

Por ejemplo, la UE prohibirá la exportación de piezas y equipos necesarios para la modernización de las refinerías de petróleo, un sector que generó ingresos en 2019 por valor de 24.000 millones, aunque no se ataca al gas, del que tanto depende la UE. También se prohibirán la venta de aviones, repuestos y equipos para las aeronaves rusas lo que tendrá un impacto directo en la conectividad con Rusia ya que tres cuartas partes de la flota aérea comercial se construyeron en Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea

Además, los Veintisiete restringirán el acceso a tecnología de uso dual (civil y militar) como semiconductores, láseres y componentes clave con el objetivo de ahogar a su industria, cortarán la financiación de empresas públicas de distintos sectores y la posibilidad de que el Estado ruso y su banco central se financie en los mercados de capitales europeos, limitarán la posibilidad de que las élites rusas tengan depósitos en bancos europeos y castigarán a dos bancos -hasta ahora eran cinco- más.

“Nuestro objetivo es doblegar la economía rusa y doblegar a sus responsables políticos y económicos. Golpearemos a sectores estratégicos como el transporte, el sector aeronáutico, el sistema financiero ruso. Queremos golpear a los bancos rusos y queremos aislar financieramente a Rusia, cortar los vínculos entre Rusia y el sistema financiero mundial”, ha dicho Le Maire, en el marco de la reunión informal de finanzas. 

Desacuerdo sobre Swift

Por ahora, sin embargo, la UE se guarda munición en la recámara. Sigue sin haber consenso entre los Veintisiete para dejar de comprar gas a Rusia o expulsar al país del sistema de pagos internacionales Swift, a lo que se resisten países como Alemania, Italia, Chipre o Hungría alegando el impacto que tendría para la economía y los ciudadanos. "No se ha puesto sobre el tapete porque no estaba maduro el debate, pero no se puede excluir nada. Va a depender del comportamiento ruso y de la posibilidad de tomar más medidas restrictivas", ha dicho Borrell. 

"Es el arma nuclear financiera. Cuando tenemos un arma nuclear en las manos reflexionamos antes de utilizarla. Algunos países tienen reservas. Francia no está entre ellos" pero "hemos pedido a la Comisión Europea y al BCE que realice en las próximas horas una evaluación precisa de la utilización de esta medida", ha confirmado el ministro francés durante el Ecofin informal en París.

Pese a este encargo, los reproches de Kiev y de algunos grupos políticos europeos siguen creciendo. "En esta guerra todo es real: La locura y la crueldad de Putin, las víctimas ucranianas, las bombas que caen sobre Kiev. Solo sus sanciones son fingidas. Los gobiernos de la UE que bloquearon las decisiones duras (por ejemplo, Alemania, Hungría, Italia) se han deshonrado a sí mismos", ha reprochado el presidente del PPE, Donald Tusk. "A determinados dirigentes europeos que todavía dudan: Rusia ha lanzado una guerra de agresión horrible en Europa: expulsen a Rusia de swift y de todas partes", ha reclamado el ministro ucraniano Dmytro Kuleba.