Al menos cuatro personas han muerto y decenas permanecen desaparecidas a raíz del accidente en una mina de jade en el norte de Birmania, informan este jueves los medios locales. El operativo de emergencia recuperó los cadáveres de cuatro personas, según fotografías publicadas por el portal Khit Thit Media, mientras continúan los trabajos de búsqueda de decenas de personas sorprendidas en la madrugada del miércoles por un corrimiento de tierra en una mina de Hpakant, en el estado Kachin.

Un miembro de los equipos de rescate indicó el miércoles a EFE que se cree que al menos 50 personas fueron víctimas del alud, aunque los medios locales elevan la cifra a alrededor de un centenar. La verificación de datos es muy complicada ya que la mayoría de los desaparecidos son mineros sin licencia que buscan piedras de jade en las montañas de desechos de tierra arrojados por las compañías mineras. El alud también habría golpeado una especie de asentamiento con chamizos construidos con palos y lona ubicado cerca de un pequeño lago. Los trabajos de búsqueda y rescate son extremadamente difíciles en esta escarpada región, con inestables acantilados y donde el agua arcillosa atrapa los cuerpos al fondo.

Este tipo de sucesos son frecuentes en Hpakant, donde los mineros trabajan en condiciones extremadamente precarias. El pasado fin de semana se produjo otro accidente similar que dejó seis muertos en el mismo complejo minero, el más grande del mundo dedicado al jade, informó el portal local The Mizzima. En abril de 2020 una avalancha sepultó a más de 160 mineros mientras extraían el codiciado jade de las laderas excavadas en medio de una lluvia torrencial, y un año antes al menos 54 personas murieron a causa de un corrimiento de tierras en otro punto del complejo minero, localizada a unos 800 kilómetros al norte de la capital, Naipyidó.

Las minas de jade, a las que la prensa extranjera tiene el acceso vedado, se han convertido en un imán para miles de birmanos empobrecidos procedentes de todo el país, pero en la mayoría de los casos los beneficios son escasos y los riesgos son elevados. Birmania es el mayor productor mundial de jadeíta, una preciada variedad de jade que se extrae principalmente en las montañas de Kachin y es especialmente codiciada en la vecina China, donde van a parar la mayoría de las exportaciones.