El barco humanitario Louise Michel, financiado por el artista de arte urbano británico Banksy, se encuentra a la espera de un puerto seguro para desembarcar a 170 migrantes después de poder evacuar ayer a 49 de ellos a una lancha de la Guardia Costera italiana.

La embarcación, de bandera alemana, había pedido ayuda al encontrarse al máximo de su capacidad tras subir a bordo a 130 migrantes que iban a la deriba en una barca, que se sumaron a los 89 rescatados el viernes. La Louise Michel explicó que no podía moverse debido al peso.

La Guardia Costera italiana aseguró en una nota que tras informar al centro de coordinación de rescate de Malta y las autoridades alemanas, decidió intervenir ante "el empeoramiento de las condiciones meteorológicas en la zona". Se envió una lancha desde la isla de Lampedusa que embarcó a las 49 personas más vulnerables, entre ellas 32 mujeres, 13 niños y 4 hombres. También se hicieron cargo del cadáver del migrante que se encontró en la barca del último rescate.

Hasta el cierre de esta edición, ni Malta ni Italia habían autorizado el desembarco de los migrantes que quedan a bordo.

Al SOS del barco alemán también respondieron dos barcos humanitarios, que ayer se dirigían hacia su posición. Uno es el Sea Watch 4, que ya lleva 201 migrantes a bordo y también espera un puerto de acogida, indicó a la AFP un portavoz de la oenegé alemana Sea Watch, que fleta este barco junto a Médicos Sin Fronteras (MSF).

En paralelo, el colectivo italiano de izquierda Mediterránea anunció el envió del barco Mare Ionio desde el puerto de Augusta, en Sicilia, para brindar ayuda al Louise Michel, alegando también la falta de respuesta de Italia y Malta frente al "peligro de muerte inminente" que corren los migrantes.