El Ejército de Israel informó ayer de que había frustrado "un intento de infiltración de una célula terrorista" de la milicia libanes Hizbolá en su territorio, abriendo fuego contra hombres armados justo después de que cruzaran la frontera norte con el Líbano. Por contra, la milicia chií, apoyada por Irán, rechazó las acusaciones de Israel y negó que hubiera "habido un enfrentamiento ni un tiroteo". "Solo ha habido una parte, que tiene miedo, está ansiosa y es un tenso enemigo", manifestó.

Corresponsales de la AFP de cada lado de la frontera dieron cuenta de explosiones. Los incidentes se produjeron "en la región del monte Dov", dijo el portavoz militar Jonathan Conricus, en referencia a una ladera del monte Hermón, reivindicado por Líbano que llama al sector "granjas de Shebaa". El Ejército israelí añadió que no sabía en qué "condiciones físicas" se encontraban los "terroristas" que regresaron a Líbano y precisó que no hubo heridos. "Las fuerzas del Ejército están en estado de alerta y preparadas para reaccionar", concluyó. Un corresponsal de la AFP informó de decenas de ataques de artillería israelí en un sector de las "granjas de Shebaa", cerca de la posición militar israelí de Ruaissat al Alam.