La Unión Europea tiene previsto empezar a reabrir sus fronteras exteriores -cerradas desde el pasado 16 de marzo a todo viaje no esencial- el próximo 1 de julio, cuando expira la prórroga aprobada hace 15 días. Sin embargo, a cuatro días de la fecha, los Veintisiete todavía no han conseguido cerrar un acuerdo sobre la lista de países terceros que tendrán vía libre para retomar los viajes y sus conexiones con la Unión Europea.

La intención de la UE, en todo caso, es empezar a abrir de forma extremadamente limitada y restringida solo aquellos países terceros con una situación epidemiológica similar a la del continente europeo, lo que dejaría fuera a países como Estados Unidos, Rusia, Arabia Saudí y buena parte de Latinoamérica.

Tras varios debates infructuosos esta semana, el tercer intento de los embajadores permanentes de los Veintisiete se saldó ayer, tras cinco horas de reunión, sin acuerdo aunque con un nuevo documento de compromiso sobre la mesa que deberá ahora ser examinado por las capitales europeas.

"Hay de plazo hasta mañana (sábado) a las 18.00 horas para consultas y verificar posiciones. En función de ello decidirán si lanzan o no un procedimiento escrito (para aprobar la recomendación)", informó otra segunda fuente. Según avanzó este jueves el secretario de Estado de Turismo de Francia, Jean-Baptiste Lemoyne, el plan es adoptar una primera lista blanca con "entre 20 y 50 países" que podrían retomar las conexiones con Europa. Según la agencia Bloomberg, la propuesta sobre la mesa incluiría a un total de 18 países entre los que figuran Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Japón y China si la decisión es recíproca y Pekín acepta abrir sus fronteras a los europeos. Entre los criterios sobre la mesa para seleccionar a los países terceros considerados más seguros se incluyen: el número de casos por 100.000 habitantes durante los últimos 14 días, si la tendencia es estable o a la baja y las medidas adoptadas por los gobiernos terceros (rastreo, test y medidas de contención).

Aunque no es un requisito, los gobiernos también tendrán en cuenta la fiabilidad de los datos ofrecidos por países terceros así como la reciprocidad en la decisión. Es decir, si el país en cuestión permite los viajes hacia Europa o no como es el caso de Estados Unidos. "Será una combinación de criterios para obtener la mejor imagen epidemiológica del país", apuntan las mismas fuentes.

Según recuerda una segunda fuente, "la seguridad" y no "la política" será el criterio principal a la hora de determinar cuáles son los países "seguros" cuyos viajeros pueden entrar en la UE. La lista será además flexible y se revisará regularmente, en principio cada dos semanas, para tener en cuenta la evolución del Covid-19, de forma que se retomen las conexiones con los destinos cuya situación mejore y cumpla los criterios europeos o se restrinjan con aquellos donde empeore la situación. De momento, y en función de los últimos datos del Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades (ECDC, en sus siglas en inglés), quedarían fuera de la lista Brasil, Chile Arabia Saudí, Omán y Armenia, los cinco con más de 120 casos por cada 100.000 habitantes.

Todos ellos lejos, por tanto, de la situación en la UE donde la mayoría de los estados miembros y regiones registran menos de 20 casos por cada 100.000 habitantes, con la excepción de Suecia, regionesde Portugal (Lisboa y Algarve), en Escocia, en España (Madrid y Catalunya) y otros países miembros.