El ministro francés de Educación, Jean-Michel Blanquer, planteó ayer una reapertura paulatina de las escuelas a partir del 11 de mayo, escalonada en tres semanas y organizada de forma que ninguna clase tenga más de 15 alumnos.

En la primera semana solo volverán a clase los alumnos de 6 años, que están aprendiendo a leer, y los de 10 años, que preparan el paso al ciclo siguiente, explicó el ministro durante una comparecencia en la Asamblea Nacional.

Los estudiantes de 11, 14 y 16 años, además de los de Terminal, que tienen que preparar el paso a la universidad, volverán en la segunda semana, al igual que los de Formación Profesional que tengan formación en talleres.

El resto de los alumnos lo hará durante la tercera semana, según la propuesta del ministro.

Blanquer indicó que, para limitar el número de alumnos por clase, se estudian opciones como continuar con la enseñanza a distancia para la mitad de la clase en semanas alternas o combinar la docencia con actividades deportivas. Aseguró que una familia podrá negarse a enviar a sus hijos a la escuela, pero en ese caso tendrá que garantizar que siguen la enseñanza a distancia.

El número global de casos confirmados de coronavirus se elevaba ayer a 117.324 en Francia, que acumula 20.796 muertes desde el inicio de la epidemia, tras añadir 531 fallecimientos en 24 horas. En total siguen hospitalizadas 30.106 personas, pero el saldo entre ingresos y altas se mantiene a la baja, con 478 personas menos en 24 horas. Aunque hay 5.433 pacientes graves, ayer eran 250 menos que el lunes.