El Gobierno de Marruecos deportó ayer a una delegación del Parlament catalán que iba en un viaje de cooperación para dar su apoyo a la causa saharaui. Entre los ocho catalanes había tres diputados y miembros de la Agencia Catalana de Cooperación, del Fondo Catalán de Cooperación y de la Asociación de Ayuntamientos solidarios con el Sáhara.

El Parlament había comunicado el viaje a Asuntos Exteriores y, como en otras visitas, el Ministerio trató de tramitar un permiso de acceso a los territorios del Sáhara Occidental, que recibió el rechazo de Marruecos. A los integrantes de la delegación catalana les impidieron bajar del avión al llegar al aeropuerto de El Aaiún y les dieron unas tarjetas de embarque con todos sus datos con destino Las Palmas.