La Casa Blanca ha presentado este lunes un proyecto de presupuestos para el año fiscal 2021 de 4,89 billones de dólares (unos 4,4 billones de euros), un documento que incluye importantes recortes del gasto público no militar. Estos serían los últimos presupuestos del mandato de Donald Trump.

Mayor gasto en defensa, en exploración espacial con el objetivo de Marte en 2030, y recortes sustanciales en asistencia social, ayuda externa y medioambiente, es el nuevo plan presupuestario del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que incide en sus promesas de campaña para buscar la reelección en noviembre.

"Nuestra perspectiva es que tenemos un déficit de billones de dólares hasta donde se puede ver, y tenemos que atender esos déficit y esos números tienen que bajar", apuntó Russell Vought, director interino de la Oficina de Gestión de Presupuestos de la Casa Blanca al presentar la propuesta.

El proyecto presupuestario para el año fiscal 2021, que comienza en octubre, asciende a un total de 4,8 billones de dólares.

La propuesta incluye 740.500 millones de dólares en gasto de defensa (un 0,3% más), por delante de los 590.000 millones que se destinarían a partidas no militares (un 5% menos), incluida una reducción del 21% a la ayuda externa.

Además recorta en un 37% la financiación del Departamento de Comercio, un 26% la de la Agencia de Protección Ambiental, un 15% la del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbanístico, un 9% la del Departamento de Sanidad y Servicios Humanos y un 8% la del Departamento de Educación. También hay recortes en Agricultura, Ayuda Exterior, Trabajo y Energía. Igualmente prevé endurecer los requisitos para acceder a los sistemas sanitarios Medicare y Madicaid.

Estos presupuestos deberán ser debatidos ahora en el Congreso, donde el opositor Partido Demócrata controla la Cámara de Representantes, por lo que no hay opción alguna de que el documento sea aprobado tal cual está ahora. Sin embargo, sí tiene un importante significado político, ya que plantea las prioridades de la campaña electoral de Trump para la reelección en las presidenciales de noviembre.

Estos recortes irían en contra del acuerdo alcanzado en agosto entre la Casa Blanca y el Congreso para elevar el techo de gasto tanto en defensa como en gasto no militar.

"Todo el mundo sabe que los últimos presupuestos de Trump están muertos en cuanto lleguen al Congreso. Es solo una pirueta política para regalar los oídos a los extremistas de su partido", ha afirmado el senador demócrata Sheldon Whitehouse, quien trabaja junto a los republicanos en la reforma del proceso de tramitación presupuestario.

La portavoz demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, ha reprochado a Trump que "año tras año los presupuestos de Trump buscan infligir recortes devastadores en salvavidas cruciales de los que dependen millones de estadounidenses".