Rusia decidió este jueves cerrar su frontera oriental, en la que comparte miles de kilómetros con China, para prevenir la propagación del nuevo coronavirus causante de la neumonía de Wuhan.

"Hoy fue firmado el correspondiente decreto, y ya entró en vigor. Se cerrará la frontera en la región del Lejano Oriente y se tomarán otras medidas" para frenar el avance de la enfermedad, afirmó Mishustin durante una reunión del gabinete.

Por su parte, el Ministerio de Exteriores de Rusia ha recomendado a los ciudadanos no viajar a China a menos que se trate de casos de extrema necesidad.

Rusia ha suspendido además temporalmente la entrega de visados electrónicos a ciudadanos chinos, que no podrán ingresar al país a través de los puestos de control ubicados en el Lejano Oriente, la región de Kaliningrado, San Petersburgo y la región de Leningrado.

De momento no se ha registrado ningún caso del virus 2019-nCoV en Rusia, de acuerdo con las autoridades rusas.

El presidente de Rusia, Vladímir Putin, pidió estar alerta ante imprevistos para minimizar las pérdidas humanas.

El Gobierno está en contacto con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y con la autoridades de China y toma en consideración sus recomendaciones.

Los científicos rusos, asegura Moscú, están además "cerca" de crear una vacuna contra el coronavirus y ya han desarrollados dos pruebas para su detección.

Ya son 170 los muertos por el coronavirus en China

El número de fallecidos por el nuevo coronavirus causante de la neumonía de Wuhan en China se elevó hoy a 170, y el de casos confirmados a nivel nacional, a 7.711.

Según el informe diario de la Comisión Nacional de Sanidad, actualizado a las 00.00 hora local (16.00 GMT del miércoles), el número de pacientes en estado grave se sitúa en 1.370, mientras que 124 personas superaron la enfermedad y fueron dadas de alta.

Durante la jornada del miércoles se registraron 38 decesos, 1.737 casos confirmados, se agravó el estado de 131 pacientes y se curaron otros 21.

Hasta el momento se han detectado 12.167 casos sospechosos -es decir, que presentan síntomas pero todavía no se ha confirmado que hayan contraído el coronavirus-, y unas 82.000 personas que han estado en contacto con enfermos permanecen bajo observación médica.

La mayoría de los nuevos casos y fallecimientos se han registrado en la provincia donde se originó el brote, Hubei (centro-este del país), donde este miércoles se sumaron 1.032 casos confirmados y 37 muertes, elevando el total de defunciones a 162, según informó hoy la Comisión de Sanidad de esa región.

En la capital, Wuhan, se detectaron ayer 356 nuevos casos y se confirmaron 25 decesos. Esta ciudad es el epicentro de la enfermedad y se encuentra desde hace una semana con todos los accesos cortados -quedan 9 millones de personas dentro de la ciudad, según las autoridades locales- para tratar de contener la expansión del virus.

El resto de muertes a nivel nacional se han producido en las regiones de Sichuan, Hebei, Henan, Heilongjiang, Hainan, Pekín y Shanghái.

Tíbet, la hasta ahora única región que no había confirmado caso alguno, dejó de serlo ayer al reportar su primer contagio probado.

En el extranjero, se han confirmado contagios en países de la región como Tailandia, Japón y Singapur, así como en otras naciones más lejanas como Estados Unidos, Australia, Francia o Alemania, aunque fuera de China no se ha producido ninguna muerte por el momento.

El último país en unirse a la lista de Estados extranjeros con casos de coronavirus ha sido India, donde un estudiante indio de la Universidad de Wuhan ha dado positivo.

El caso se reportó en el estado de Kerala, en el sur de la India, donde el paciente se encuentra ahora en aislamiento en un hospital regional, informó en un comunicado el Ministerio de Salud indio. "El paciente está estable y está siendo monitorizado de cerca", explica la nota, que no ofrece más detalles sobre el sexo o la edad de la persona afectada.

Cabe destacar que en el conteo nacional ofrecido por las autoridades chinas y por la prensa estatal se incluyen los ocho casos confirmados hasta el momento en Taiwán, considerada por Pekín como una provincia rebelde.

Los síntomas del nuevo coronavirus, denominado 2019-nCoV provisionalmente por la Organización Mundial de la Salud (OMS), son en muchos casos parecidos a los de un resfriado, pero pueden venir acompañados de fiebre y fatiga, tos seca y disnea (dificultad para respirar).

"Grave escasez" de suministros médicos en Hubei

La provincia centrooriental china de Hubei, donde se originó el brote de neumonía, padece una "grave escasez" de suministros médicos para enfrentarse a la enfermedad, indicó su gobernador, Wang Xiaodong.

Según informa este jueves la televisión estatal CGTN, Wang ofreció una rueda de prensa anoche en la que subrayó la gravedad del brote en la ciudad de Huanggang, una de las que se encuentran cerradas en la provincia desde la semana pasada.

Huanggang es una ciudad de unos 7,5 millones de habitantes que se encuentra a 76 kilómetros de la capital provincial, Wuhan -epicentro del brote-, y que hasta el momento ha confirmado 496 casos de neumonía causada por el coronavirus y una docena de fallecimientos.

Entre los cinco millones de personas que se marcharon de Wuhan antes de su cierre -hay que recordar que estamos en la época de vacaciones del Año Nuevo chino-, entre un 60 y un 70 por ciento lo hicieron a otras ciudades de Hubei.

Este martes se abrió en Huanggang un hospital dedicado al tratamiento de esta enfermedad, y Wang prometió que el Gobierno regional no permitiría que esa ciudad se convierta en una "segunda Wuhan".

La televisión pública cita a un trabajador de un hospital de esa urbe, que explica: "Los suministros médicos en nuestro hospital solo dan para un día de trabajo. No podemos recibir pacientes sin mascarillas y ropa de protección. Están casi agotadas y no tenemos dónde comprarlas".

"Algunos de nuestros médicos están vistiendo chubasqueros y se ponen bolsas de basura desechables para cubrirse los pies y protegerse", agregó esa fuente.

La agencia estatal Xinhua informó esta madrugada de que el primer ministro chino, Li Keqiang, subrayó el refuerzo de los suministros médicos como una de las prioridades para la lucha contra esta neumonía vírica.

Ayer mismo, el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información indicó que la falta de mascarillas se debe en parte a que el aumento de la demanda se ha producido en un momento en el que China -que fabrica el 50 por ciento del total mundial- está produciendo 8 millones de unidades al día, mientras que fuera del período vacacional la media es de unos 20 millones diarios.

Entre los planes de esa institución para garantizar el suministro están reanudar la producción a niveles habituales, pedir a los exportadores de mascarillas que las vendan en China en lugar de en el extranjero y también aumentar la importación.

Según los últimos datos oficiales, casi el 60 % de los más de 7.700 casos confirmados hasta ahora a nivel nacional se han producido en la provincia de Hubei, donde se han registrado 162 de los 170 fallecimientos por la enfermedad.