El director de banca privada de Eurobic, Nuno Ribeiro da Cunha, asesor de la angoleña Isabel dos Santos, conocida como "la mujer más rica de África" e imputada por delitos de corrupción, fue encontrado muerto en su residencia de Lisboa.

El cuerpo de Cunha fue hallado anoche en el garaje de su casa, según confirmaron este jueves fuentes policiales que apuntaron que una de las hipótesis que barajan es un posible suicidio.

La policía lusa no ha ofrecido más detalles sobre el caso, aunque medios locales señalan que Cunha estaba ya bajo investigación por un supuesto intento de suicidio con arma blanca ocurrido hace dos semanas en un oscuro incidente en el que los investigadores no excluían una tentativa de homicidio.

Nuno Ribeiro da Cunha, de 45 años, era de uno de los brazos gestores de Isabel dos Santos en Portugal, director de banca privada de Eurobic -donde la hija del expresidente de Angola José Eduardo Dos Santos llegó a controlar el 42 % de las acciones-, y asesor en la estatal angoleña Sonagol que ella presidió.

La muerte de Cunha coincide con la visita a Lisboa del fiscal general de Angola, Hélder Pitta Grós, que se reunirá hoy con su homóloga portuguesa, Lucília Gago, tras anunciar, el miércoles, la imputación de Dos Santos por delitos de corrupción y enriquecimiento ilícito.

La investigación contra Isabel dos Santos comenzó tras una denuncia de su sucesor en Sonagol, Carlos Saturnino, que la acusó de haber ordenado, después de dejar la dirección, una transferencia millonaria de la petrolera angoleña a una empresa de Dubai a través del banco Eurobic.

La denuncia se ha transformado en un escándalo después de que, el domingo, el Consorcio Internacional de Periodismo e Investigación (ICIJ) destapara el "Luanda Leaks", más de 715.000 ficheros que detallan los esquemas financieros presuntamente utilizados por Isabel dos Santos y su marido, Sindika Dokolo, para desviar dinero público de Angola hacia paraísos fiscales.

El escándalo ha sacudido al mundo de las finanzas de Portugal, país que ha sido el trampolín de Dos Santos, presente en importantes compañías lusas como Galp, el Banco Portugués de Inversiones (donde se enfrentó con Caixabank, actual dueña), la energética Efacec y Eurobic, que esta semana anunció que cortaba la "relación comercial con entidades controladas por el universo de la accionista Isabel Dos Santos y personas estrechamente relacionadas".

El primer ministro de Portugal, António Costa, que se había mantenido en silencio sobre el escándalo, negó hoy ante los periodistas cualquier trato de favor hacia Isabel dos Santos.

"Ni especial, ni de favor, ni en contra. Tratamos a todas las personas igual", afirmó Costa.