La Duma (cámara baja del Parlamento ruso) respaldó ayer por abrumadora mayoría a Mijaíl Mishustin, un hombre que hasta ahora se hallaba al frente de la Hacienda rusa, como nuevo primer ministro en sustitución del dimitido Dmitri Medvédev. Mishustin recibió el respaldo de 383 diputados, miembros de Rusia Unida, el partido oficialista, aunque también de otras fuerzas de la llamada oposición sistémica, que no cuestionan la política presidencial. Solo hubo 41 abstenciones, de parlamentarios del PC ruso.

El Gobierno encabezado por Medvédev presentó el miércoles su dimisión después de que el presidente Putin anunciara, en su discurso anual a la nación, una batería de reformas de la Constitución que le permitirán mantener su influencia cuando finalice en 2024 su actual mandato presidencial, no prorrogable. Entre ellas figura reforzar los poderes del primer ministro, que será nombrado por el Parlamento, en detrimento de las presidenciales. Los analistas estiman que Putin, de 67 años, podría pasar a ser primer ministro tras finalizar su mandato o bien dirigir su sucesión desde la presidencia del Consejo de Estado, cuyas funciones también serán reforzadas.