El presidente de EE UU, Donald Trump, opinó ayer que el juicio político en su contra no debería comenzar y que el Tribunal Supremo debería frenarlo, días antes del inicio previsto en el Senado de ese proceso relacionado con las presiones del mandatario a Ucrania.

Es muy improbable que el Supremo decida meterse en la disputa entre los poderes legislativo y ejecutivo, y no está del todo claro que tenga potestad para hacerlo. Los demócratas de la Cámara de Representantes se reunirán hoy, martes, para decidir cuándo enviarán los cargos al Senado, lo que pondrá en marcha el proceso.