El "speaker" (presidente) más popular que ha tenido la cámara de los Comunes, John Bercow, se despidió ayer de sus funciones con la voz quebrada por la emoción y sin tener que pronunciar su conocida llamada al orden, a la que tantas veces ha recurrido, con timbre ronco, para calmar los debates del "Brexit". La dimisión de Bercow, de 56 años, tras diez años de ejercicio del cargo, fue fijada para ayer cuando se pensaba que esa sería la fecha de salida británica de la UE, ahora aplazada al 31 de enero. Bercow fue ayer ampliamente elogiado, aunque desde las filas conservadoras se le ha acusado de favorecer a los detractores del "Brexit", entre los que se encuentra. Sus partidarios, por contra, aseguran que se ha limitado a defender las prerrogativas del Parlamento cada vez que han sido puestas en entredicho por los gobiernos de Theresa May, primero, y de Boris Johnson, después.